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lunes, 10 de diciembre de 2007

El PAN: siete años en el poder

kaosenlared

Se han cumplido ya los primeros siete años de gobierno de la derecha del PAN. Vcente Fox y Felipe Calderón. Los resultados arrojados en todos los campos por los gobiernos panistas son desastrosos; inclusive cuando pretendían hacer cambios, las cosas no mejoraron. El mayor logro de los gobiernos panistas ha sido el saqueo del país por Vicente Fox, Marta Sahagún y sus hijos.

El aparato propagandístico de la derecha gobernante, ha tratado de confundir al evaluar el primer año de gobierno de Calderón, comparándolo con los estragos de Fox. Esto es una maniobra burda, una mentira propagada por la parafernalia publicitaria. El único cambio entre ambos gobiernos ha sido el simple cambio de manos de la administración pública. La política económica-social de Fox no solo sigue su corso; ha seguido causando malestar y perjuicio a la población. Con el agravante que ahora se hace con muchos menos recursos, los pocos que se libraron del saqueo foxista.


En siete años de gobierno de Fox a Calderón, el principal fracaso que inconforma a los mexicanos es la promesa panista, incumplida, de democracia, que repercute en la falta de resultados económicos en beneficio de la mayoría de la población y por la acumulación de riqueza en unas cuantas manos. Los recientes impactos ambientales y meteorológicos sobre Tabasco, Chiapas y Veracruz, han desvelado la verdadera naturaleza política del panismo, que carece de un andamiaje institucional para atender a la población afectada, que en cualquier desgracia queda expuesta al abandono y a lo sumo a la caridad pública, o a su suerte, como denuncia el gobernador Granier, ante el olvido de Calderón de sus propias promesas.

Tabasco está anegado debido a la política de Calderón de favorecer a los empresarios de la energía eléctrica. El régimen de lluvias es parte de la guerra climática, como lo son los sismos, que se dan sin ser Tabasco una zona telúrica, ambos fenómenos no naturales son decisiones políticas para apoderarse de los recursos del sur, al haber quedado paralizada la población con un programa de choque psicosocial.

Por otra parte, las denuncias sobre el papel que juegan las anticonstitucionales generadoras privadas de energía, causaron un gran impacto, al afectar a un millón de habitantes y por sus elevadas tarifas que dañan los escasos recursos de la economía familiar, afectada por la inflación, el ascenso de los precios de productos de consumo y por el incremento de precio de la gasolina.

Ante las denuncias contra las anticonstitucionales empresas privadas generadoras de energía eléctrica que han privatizado la CFE, la sensibilidad política de Felipe Calderón quedó ampliamente demostrada, al dar un subsidio de 30% a las grandes empresas consumidoras de energía eléctrica. Esta es la justicia panista.

La peor pesadilla de Calderón se llama Vicente Fox y Marta Sahagún; es la herencia de un gobierno insuperable, por todo lo que se robaron y la ruina que ocasionaron. Desde la industria hasta la agricultura, miles de empleos y millones de migrantes. Las relaciones con los países amigos destrozadas y el desprestigio de servir de alfombra a las pretensiones de Bush contra los latinoamericanos y en particular cubanos y venezolanos.

El grave conflicto que heredó con el gobierno norteamericano hasta el momento no se ha superado, Calderón no ha realizado una sola gira por la Unión Americana que le permita aflojar un tanto la presión y ocupar el lugar que le corresponde y no el último lugar, conforme al interés de Bush en América latina.

El Plan México, lejos de ser la expresión de una relación exitosa, México- Estados Unidos y concretamente sus gobiernos, revela las tensiones acumuladas y mal resueltas, además de ser un peligro real para la soberanía de México. El Plan México, mal llamado Iniciativa Mérida, es un factor de rechazo de la población por su carácter militar y de inteligencia intervensionista, con el propósito de establecer un área de seguridad Norteamericana del Río Bravo a la frontera de Colombia.

El Plan México es aislacionista, coloca a México y a Centro América bajo el dominio del poder militar y económico norteamericano. Lo deja fuera de la influencia de los gobiernos populares que mayoritariamente dominan en América del Sur, con un proyecto de desarrollo democrático opuesto al neoliberalismo, contrapuesto al modelo de saqueo de las empresas norteamericanas y españolas.

El gobierno de Fox se inició con un alto grado de expectativas, de lo ofrecido hasta eso se llevó. Calderón, carece de fortuna política -en el sentido de Maquiavelo-, a un año de gobierno, su desgaste político y oportunidades, es notoriamente descendente. Los escenarios venideros no son para nada optimistas. Lejos de poder visualizar que superará bien el segundo año de gobierno y poder alcanzar el tercero en condiciones de lograr la ansiada mayoría, todo indica que la bancada panista de Calderón será desfondada y las condiciones de gobernabilidad se revertirán drásticamente, convirtiendo en sueño de opio los futuros 25 años de gobierno del PAN.

Se cumplen siete años de gobiernos de la derecha del PAN, Vicente Fox y Felipe Calderón. Los resultados arrojados en todos los campos por los gobiernos panistas son desastrosos, inclusive donde pretendían hacer cambios, las cosas no solo no mejoraron, sino empeoraron. El mayor logro de los gobiernos panistas, es el saqueo del país por Vicente Fox, Marta Sahagún y sus hijos.

El aparato propagandístico de la derecha gobernante, ha tratado de confundir con la evaluación del primer año de gobierno de Calderón, al compararla con los de Fox. Esto es una maniobra burda, una mentira. Toda vez que lo único que cambió fue la administración de una las manos a otras. La política económica-social de Fox no solo se mantiene se ha profundizado en contra de la población. Con el agravante que ahora se hace con muchos menos recursos producto de la enorme deuda del saqueo foxista.

En siete años de gobierno de Fox a Calderón, el principal fracaso que reportan los mexicanos es la promesa panista de democracia, por la falta de resultados económicos en la mayoría de la población y por la acumulación de riqueza en unas cuantas manos y la riqueza en poquísimas. Los recientes acontecimientos de Tabasco, Chiapas y Veracruz, han demostrado la naturaleza política del panismo al pueblo de México, carece de un andamiaje institucional para atender a la población afectada y están expuestos a quedar abandonados a la caridad pública o a su suerte, como denuncia el gobernador Granier, al olvidar Calderón sus promesas.

Los tabasqueños fueron inundados debido a la política de Calderón de favorecer a los empresarios generadores de energía eléctrica. El régimen de lluvias es parte de la guerra climática, como lo son los sismos sin ser Tabasco una zona telúrica, ambos fenómenos no naturales son decisiones políticas para apoderarse de los recursos del sur, al paralizar a la población con un programa de choque psicosocial.

Por otra parte, las denuncias sobre el papel que juegan las anticonstitucionales generadoras privadas de energía, causaron un gran impacto, al afectar a un millón de habitantes y por sus elevadas tarifas que dañan los escasos recursos de la economía familiar, afectada por la inflación, el ascenso de los precios de productos de consumo y por el incremento de precio de la gasolina.

Ante las denuncias contra las anticonstitucionales empresas privadas generadoras de energía eléctrica que han privatizado la CFE, la sensibilidad política de Felipe Calderón quedó ampliamente demostrada, al dar un subsidio de 30% a las grandes empresas consumidoras de energía eléctrica. Esta es la justicia panista.

La peor pesadilla de Calderón se llama Vicente Fox y Marta Sahagún; es la herencia de un gobierno insuperable, por todo lo que se robaron y la ruina que ocasionaron. Desde la industria hasta la agricultura, miles de empleos y millones de migrantes. Las relaciones con los países amigos destrozadas y el desprestigio de servir de alfombra a las pretensiones de Bush contra los latinoamericanos y en particular cubanos y venezolanos.

El grave conflicto que heredó con el gobierno norteamericano hasta el momento no se ha superado, Calderón no ha realizado una sola gira por la Unión Americana que le permita aflojar un tanto la presión y ocupar el lugar que le corresponde y no el último lugar, conforme al interés de Bush en América latina.

El Plan México, lejos de ser la expresión de una relación exitosa, México- Estados Unidos y concretamente sus gobiernos, revela las tensiones acumuladas y mal resueltas, además de ser un peligro real para la soberanía de México. El Plan México, mal llamado Iniciativa Mérida, es un factor de rechazo de la población por su carácter militar y de inteligencia intervensionista, con el propósito de establecer un área de seguridad Norteamericana del Río Bravo a la frontera de Colombia.

El Plan México es aislacionista, coloca a México y a Centro América bajo el dominio del poder militar y económico norteamericano. Lo deja fuera de la influencia de los gobiernos populares que mayoritariamente dominan en América del Sur, con un proyecto de desarrollo democrático opuesto al neoliberalismo, contrapuesto al modelo de saqueo de las empresas norteamericanas y españolas.

El gobierno de Fox se inició con un alto grado de expectativas, de lo ofrecido hasta eso se llevó. Calderón, carece de fortuna política -en el sentido de Maquiavelo-, a un año de gobierno, su desgaste político y oportunidades, es notoriamente descendente. Los escenarios venideros no son para nada optimistas. Lejos de poder visualizar que superará bien el segundo año de gobierno y poder alcanzar el tercero en condiciones de lograr la ansiada mayoría, todo indica que la bancada panista de Calderón será desfondada y las condiciones de gobernabilidad se revertirán drásticamente, convirtiendo en sueño de opio los futuros 25 años de gobierno del PAN.