Contra la embestida clerical
kaosenlared
Claudicar ante la jerarquía católica equivale a respaldar al gobierno espurio. Hay que salir a la calle para defender los ideales juaristas.
La propagación de la “fe católica”entre los indígenas del Nuevo Mundo, implicó su genocidio, tortura, y el exterminio de civilizaciones enteras. La inquisición en México se inicia con el fraile español Martín de Valencia, siguiéndole después otros inquisidores como frayJuan de Zumárraga el primer inquisidor Apostólico de la Nueva España. Lamentablemente para los indígenas debían permanecer como esclavos de los españoles ¡A perpetuidad!
Claudicar ante los abusos del clero es respaldar al gobierno espurio de Felipe Calderón, Fecal. Este tiene el apoyo de los grandes empresarios, los grupos conservadores y la jerarquía derechista, representada por personajes como Norberto Rivera, Juan Sandoval Iñiguez y onésimo Cepeda, entre otros.
Sus proyectos consisten en la defensa de los grandes intereses económicos y en el ataque al estado laico. Este año, jerarcas como Rivera y grupos a su servicio como el Colegio de Abogados Católicos, presidido por Armando Martínez, lanzaron una intensa campaña para modificar la constitución con el pretexto de implantar la “educación religiosa”, como una consigna que lleva implícito un programa muy concreto que incluye la educación religiosa en las escuelas públicas, el acceso de la jerarquía católica a los medios electrónicos de comunicación, a los cargos de elección popular, y a diferentes ámbitos de la vida institucional, desde la asistencia social hasta las fuerzas armadas mediante las llamadas “capellanías militares”.
Algunas personas protestamos fuera de Catedral enarbolando la figura de Juárez y consignas en defensa de la Constitución vigente y del estado laico, lo cual nos valió ser agredidos por los grupos de choque al servicio del cardenal. Sin embargo, seguiremos manifestándonos públicamente para defender nuestros valores, como lo han hecho también académicos y líderes de opinión en diferentes foros y publicaciones.
Se supone que en México hay libertad de expresión, por lo que podemos manifestar esas posiciones, lo mismo que nuestro rechazo a los abusos sexuales del clero, de los cuales algunas personas hemos sido víctimas en algún momento de nuestra vida.
No es posible oponerse al gobierno espurio sin cuestionar su amasiato con la jerarquía conservadora y con grupos del corte de Provida. Por eso, el pasado primero de diciembre, Jorge Serrano Limón y Guillermo Bustamente Manilla, presidente de la Unión Nacional de Padres de Familia, junto con onésimo Cepeda, se contaron entre los invitados al festejo del primer año del golpe de estado que consumó Fecal el año pasado con el apoyo de soldados vestidos de civil.
Este es un llamado a los ciudadanos y ciudadanas conscientes para defender, en las calles si es necesario, la vigencia del estado laico, y para oponerse a los abusos de la jerarquía católica. Desafortunadamente, desde la izquierda algunas voces se afanan por defender a Norberto y a otros jerarcas, y por rechazar cualquier crítica al clero, pronto veremos hasta dónde son capaces de llegar en esa actitud entreguista. Mientras tanto, debemos estar en disposición de continuar nuestra lucha en defensa de los ideales juaristas.
Claudicar ante la jerarquía católica equivale a respaldar al gobierno espurio. Hay que salir a la calle para defender los ideales juaristas.
La propagación de la “fe católica”entre los indígenas del Nuevo Mundo, implicó su genocidio, tortura, y el exterminio de civilizaciones enteras. La inquisición en México se inicia con el fraile español Martín de Valencia, siguiéndole después otros inquisidores como frayJuan de Zumárraga el primer inquisidor Apostólico de la Nueva España. Lamentablemente para los indígenas debían permanecer como esclavos de los españoles ¡A perpetuidad!
Claudicar ante los abusos del clero es respaldar al gobierno espurio de Felipe Calderón, Fecal. Este tiene el apoyo de los grandes empresarios, los grupos conservadores y la jerarquía derechista, representada por personajes como Norberto Rivera, Juan Sandoval Iñiguez y onésimo Cepeda, entre otros.
Sus proyectos consisten en la defensa de los grandes intereses económicos y en el ataque al estado laico. Este año, jerarcas como Rivera y grupos a su servicio como el Colegio de Abogados Católicos, presidido por Armando Martínez, lanzaron una intensa campaña para modificar la constitución con el pretexto de implantar la “educación religiosa”, como una consigna que lleva implícito un programa muy concreto que incluye la educación religiosa en las escuelas públicas, el acceso de la jerarquía católica a los medios electrónicos de comunicación, a los cargos de elección popular, y a diferentes ámbitos de la vida institucional, desde la asistencia social hasta las fuerzas armadas mediante las llamadas “capellanías militares”.
Algunas personas protestamos fuera de Catedral enarbolando la figura de Juárez y consignas en defensa de la Constitución vigente y del estado laico, lo cual nos valió ser agredidos por los grupos de choque al servicio del cardenal. Sin embargo, seguiremos manifestándonos públicamente para defender nuestros valores, como lo han hecho también académicos y líderes de opinión en diferentes foros y publicaciones.
Se supone que en México hay libertad de expresión, por lo que podemos manifestar esas posiciones, lo mismo que nuestro rechazo a los abusos sexuales del clero, de los cuales algunas personas hemos sido víctimas en algún momento de nuestra vida.
No es posible oponerse al gobierno espurio sin cuestionar su amasiato con la jerarquía conservadora y con grupos del corte de Provida. Por eso, el pasado primero de diciembre, Jorge Serrano Limón y Guillermo Bustamente Manilla, presidente de la Unión Nacional de Padres de Familia, junto con onésimo Cepeda, se contaron entre los invitados al festejo del primer año del golpe de estado que consumó Fecal el año pasado con el apoyo de soldados vestidos de civil.
Este es un llamado a los ciudadanos y ciudadanas conscientes para defender, en las calles si es necesario, la vigencia del estado laico, y para oponerse a los abusos de la jerarquía católica. Desafortunadamente, desde la izquierda algunas voces se afanan por defender a Norberto y a otros jerarcas, y por rechazar cualquier crítica al clero, pronto veremos hasta dónde son capaces de llegar en esa actitud entreguista. Mientras tanto, debemos estar en disposición de continuar nuestra lucha en defensa de los ideales juaristas.