Bloggeando desde Zacatecas

El Sr. López| El Fraude Electoral|La Verdad Sea Dicha|Las Protestas|Foxilandia|El Fraude Según Fox
BLOG En Constante Actualización, F5 Para Recargar

México Necesita Que Lo Gobierne Las PUTAS, Porque Sus Hijos Le Fallaron

M O R E N A (MOvimiento de REgeneración NAcional)

Blogeando Desde Zacatecas En Pie De Lucha Rumbo Al 2012, AMLO PRESIDENTE

martes, 15 de enero de 2008

Aristegui, acto de censura e inquisición administrativa

Revista Contralínea

El más reciente acto de censura contra periodistas podría dejar sin trabajo al 95 por ciento de los colaboradores de Carmen Aristegui. La plantilla del programa matutino Hoy por hoy saldrá de W Radio, propiedad de Televisa y Prisa, “porque no es digno continuar ahí”

El 3 de enero pasado Televisa y Promotora de Informaciones, SA (Prisa), dueños de W Radio, decidieron no renovar el contrato con la periodista Carmen Aristegui, hasta entonces, y desde hacía cinco años, conductora del noticiario matutino Hoy por hoy; disposición que dejará sin trabajo a poco menos de la totalidad de su plantilla laboral.

“Prácticamente el 95 por ciento de las personas estamos saliendo, porque consideramos que no es digno continuar ahí”, dice Jorge Navarijo, quien se desempeñaba como coordinador de información del equipo de Aristegui.

El elevado rating del programa radiofónico no fue suficiente para sostener a la periodista, porque Carmen y su equipo dejaron de ser compatibles con el “modelo editorial” que Televisa y Prisa –empresa de capital español propietaria del diario El País– buscan imponer en los medios informativos que controlan.

De acuerdo con la revista Proceso, la crítica de la periodista respecto a las reformas a la Ley Federal de Telecomunicaciones –también conocida como Ley Televisa, que la Suprema Corte de Justicia de la Nación declaró inconstitucional en varias de sus partes– molestó a Emilio Azcárraga Jean.

La primera represalia, indica el semanario, fue la suspensión de las transmisiones del programa de su sistema de televisión satelital Sky, ocurrida en octubre de 2006. Desde entonces, se le atribuye a Prisa la defensa parcial de la periodista y su equipo.

No obstante, cuando la trasnacional española contrató a Juan Ignacio Zavala, cuñado del presidente Felipe Calderón, y Televisa Radio asignó a Daniel Moreno, exdirector de Excélsior, como director de W Radio, a principios de 2007, iniciaron los cambios.



Censura

Para el columnista Álvaro Cepeda Neri, la salida de Aristegui de W Radio no sólo es un acto de censura, sino una inquisición administrativa; ésta, explica, consistió en no contratar a la periodista porque ejerce la libertad de expresión; entonces, para censurarla, le quitan el noticiario.

En un comunicado de prensa publicado el 4 de enero, Televisa Radio explica que la dirección “ha decidido no hacer un nuevo contrato a Carmen Aristegui, conductora de la primera emisión de Hoy por Hoy, para 2008”. Agrega que, durante su participación en ese corporativo, la periodista tuvo “total libertad hasta el último día de su compromiso con esta emisora”.

Según la empresa, “la decisión se enmarca dentro de un proceso de renovación, actualización y expansión en el que está inmersa la W, que se refleja también en otros cambios en la parrilla, que hemos realizado en los últimos meses. (…) Lamentablemente tras un año de conversaciones no hubo posibilidad de un acuerdo entre ambas partes para incorporar a Carmen Aristegui a este modelo en México, basado en el trabajo en equipo y el derecho a la información plural y que obtiene liderazgo de audiencia en todos los países”.

Jorge Navarijo explica las implicaciones del modelo: los directivos pretendían imponer un mayor control a los contenidos del noticiario e incluso el modelo de una intervención, como no ocurrió en los cinco años de trabajo. Detalla que de manera indirecta ya tenían el control: en agosto de 2007 habían logrado poner un jefe de información –Omar Sánchez de Tagle– para coordinar a los reporteros.

El periodista señala que antes era potestad de los conductores la asignación de este puesto. Aristegui, Carlos Loret de Mola y, en su tiempo, Javier Solórzano habían designado a Martha Anaya, luego a Enrique Hernández, porque desde esa jefatura se proveía información a todos los noticiarios.

“Desde que llegó el actual equipo, buscó tener el control de esa pieza que era fundamental y lo consiguió. Nosotros decidimos blindar nuestras cuatro horas diarias”, dice Jorge Navarijo. Agrega que al renegociar el contrato para 2008, la directiva propuso redactar los resúmenes de noticias que se transmiten al inicio del programa y cada hora a lo largo del mismo.

Explica que, si tienes un programa de cuatro horas, los resúmenes son como los titulares de las notas de los diarios; no redactarlos es inaceptable. Refiere que los directivos también querían conocer los nombres de todos los entrevistados; “de ahí a que digan a éste sí o a éste no lo entrevistas, el paso es muy cortito”.

Para el periodista, otro punto de conflicto es que querían decidir quién y cómo se suplía a Carmen Aristegui cuando ella dejaba el micrófono, por permisos o vacaciones: “Yo solía hacerlo, y cuando no estaba yo era porque estábamos hasta el tope de chamba, entonces buscábamos que quien estuviera fuera siguiendo el contenido que nosotros planteábamos, que era la misma línea de Carmen”.

Navarijo añade que “además de esas tres formas de intervención, restringieron el presupuesto. En octubre de 2007 presentamos un proyecto para ampliar el número de colaboradores a partir de enero y nos dijeron que sí quedaba aprobado, pero ahora cerraron la llave y no había manera de trabajar con nuevos colaboradores ni de presentar nuevas propuestas”.



Sin condiciones

Para Álvaro Cepeda la salida de Carmen Aristegui se da porque es una periodista que ha ejercido la crítica política, económica y social; por su independencia de opinión; porque ejerce perfectamente las libertades de prensa, plasmadas en nuestra Constitución Política, y porque prefirió dejar el programa que le querían condicionar, antes que volverse servil e incondicional de los empresarios de Televisa y Prisa.

Jorge Navarijo dice que “al igual que Carmen, el resto del equipo pensamos que no había condiciones para continuar: los directivos habían generado un escenario en el que no podíamos operar con los mínimos márgenes de maniobra para hacer nuestra chamba periodística y que ante eso era inaceptable permanecer”.

El periodista indica que, al 7 de enero, habían renunciado por lo menos una veintena de colaboradores, entre personas de producción, redacción, entrevistas, asistentes y el propio chofer de Aristegui. Añade que quienes permanezcan lo harán por necesidad: “El mercado está muy difícil; no es fácil renunciar a un trabajo en enero, en un año complicado que inicia con alzas de precios”.

Navarijo considera que con esta decisión no sólo pierden los trabajadores, sino también los ciudadanos, pues señala que en México hay una tendencia a cerrar los espacios, y las empresas, a ceder a las presiones de los partidos, del gobierno, de los grupos de derecha, en aras de continuar su negocio. Agrega que hay un empobrecimiento de opciones informativas y de opinión.