¡Y dale! de nueva cuenta…

Julio Ricardo Blanchet Cruz

Con la ceja levantada y arrogante expresión de perdona vidas (de “sácale-punta”) el Presidente que se molesta si le dicen o le muestran la palabra ¡espurio!...

Pues de inmediato se quiere poner la camiseta, y por eso en Irapuato durante un acto oficial en el que estuvo presente don Felipe, el Estado Mayor Presidencial conminó a un estudiante a que se quitara una camiseta que así decía: ¡Espurio!…

Solo que debajo de ella llevaba otra que decía ¿Oportunidades?, por lo que los militares mejor lo dejaron en paz, pensando que podría traer toda una docena abajo con otras palabras más comprometedoras...

De nueva cuenta, esbozando una sonrisa ciertamente socarrona (por no decir que patética) don Felipe vuelve a la carga y manifiesta con cierta alegría que le ha “pegado duro” al narcotráfico, lo que desde luego implica no solo dinero, sino mucha sangre derramada (se antojaría demasiada)…

Cabiendo preguntar ¿cómo es que alguien puede alegrarse (sin importar el costo económico) de tanta violencia y de que la sociedad se esté degradando de tal manera que ver literalmente cabezas rodando ya no impresiona a nadie?…

Y sin cambiar de tema…

Toda vez que el estado hipnótico es muy común entre todos los seres, como puede apreciarse en los juegos de los niños en los que literalmente se “sumergen” (son absorbidos por su fantasía)…

Si durante la exhibición de alguna película de terror estuviera presente don Felipe, seguro que mientras todos expresaran angustia en el rostro, Calderón sonreiría…

Haciendo patente el que al michoacano no le funciona muy bien la azotea; pues se insiste, nadie puede, en sus cinco sentidos, alegrarse porque se derrame sangre...

Cabiendo recordar que es la misma actitud que se apreció en los Bush (padre e hijo; pero sin Espíritu $anto) cuando desataron las guerras en Medio Oriente. Y por todos es sabido que los Bush son algo serio…

Y ya que estamos en estos asuntos de las matanzas que al parecer alegran al señor Calderón…

Solo a nuestro sacro $anto Gobierno se le puede ocurrir que en las condiciones de inseguridad en que vivimos y que son ampliamente conocidas por todo el mundo, se puede promover el turismo (como no sea el turismo de Alto Riesgo)…

Porque si bien es cierto que todo nuestro México tiene lugares dignos de visitarse, es igualmente cierto que ya son varias las naciones del mundo que en los pasaportes de sus ciudadanos les advierten que de venir a México deben de cuidarse de los delincuentes y de los policías (lo que sencillamente es oprobioso)…

Para terminar…

La estrepitosa caída de la Bolsa de Valores y la volatilidad (antes llamada flotación) del cambio de nuestro peso ante el dólar, da a entender a los buenos entendedores (los malos entendedores no entienden nada) que la cosa está que arde, aunque no se note…

Y que la incertidumbre en el rumbo económico de la Nación, más la galopante inseguridad en la que vivimos, no podrán traer progreso a nadie; como no sean los mismos que están provocando toda esta situación, que de seguir así, no tarda en estallar por algún lado…

Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.