Acusan legisladores a Zavaleta de “arbitraria”
jesusa cervantes
* Diputados de Convergencia, PT y PRD abandonan el recinto
México, D.F., 11 de diciembre (apro). En protesta por la forma “arbitraria” y “autoritaria” con la que la perredista Ruth Zavaleta condujo la sesión en la que se aprobaron las reformas al Cofipe, 17 diputados de Convergencia y 11 del Partido del Trabajo abandonaron el salón de plenos poco antes de la votación en lo particular.
En solidaridad, hicieron lo propio los 40 legisladores del PRD que votaron en contra de las modificaciones al Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe).
Los diputados de Alternativa y Nueva Alianza decidieron continuar en el salón, para defender sus puntos de vista.
Antes de retirarse, la diputada del PRD, Aleida Alavez, pidió el uso de la palabra para cuestionar la actitud de los diputados que aprobaron las reformas al Copife. Los panistas le silbaron y la presidenta de la Mesa Directiva, Ruth Zavaleta, intentó callarla. Alavez no lo permitió y siguió adelante, en medio de la rechifla de los panistas.
Durante la discusión de las más de 100 reservas de los partidos Convergencia, PT, Nueva Alianza y Alternativa, Zavaleta se negó en varias ocasiones a revisar si aún existía el quórum necesario para continuar la sesión.
El primero en solicitar la revisión de quórum fue Manuel Cárdenas, de Nueva Alianza. Zavaleta se negó a proceder con el argumento de que hubo un acuerdo del pleno de la Cámara de Diputados donde se obliga a los diputados a estar presentes solo cuando hay votación, no cuando hay discusión.
Layda Sansores, de Convergencia, así como Manuel Cárdenas y la propia Valentina Batres, del PRD, refutaron a Zavaleta. Le hicieron notar que un acuerdo no está por encima del Reglamento interno de la Cámara de Diputados.
Sin embargo, Zavaleta defendió su criterio, apoyada en el artículo 105 que, dijo, la faculta para que determine qué forma parte de un debate y qué no. Amparada en esa tesis, calló literalmente a más de un diputado de Convergencia.
Ricardo Cantú, del PT, pidió el uso de la palabra luego para censurar que las reformas al Copife hayan sido aprobadas por los tres partidos mayoritarios. Dijo que se trata de una reforma excluyente y dijo que por esa razón abandonaba el salón de sesiones.
No fue el único que hizo patente su inconformidad. Tres diputadas de Nueva Alianza, encabezadas por Mónica Arreola, hija de la presidenta del SNTE, Elba Esther Gordillo, sacaron una manta que decía: “No validamos la inconstitucionalidad de esta reforma”.
La tónica de la larga sesión de hoy en la Cámara de Diputados fue de un constante reclamo a la corriente Nueva Izquierda y del manifiesto encono entre los perredistas allegados a Andrés Manuel López Obrador, con la presidenta de la Mesa Directiva, Ruth Zavaleta.
También, por los constantes señalamientos de que algunos cambios al Cofipe violentan la Constitución.
Los diputados opositores ilustraron lo anterior con un ejemplo: explicaron que la Constitución dice que todo mundo tiene derecho a votar y a ser votado y que el voto es secreto e intransferible. Según ello, la cláusula de vida eterna que aprobaron pristas, panistas y la corriente NI del PRD se contrapone con el principio constitucional.
La diputada perredista Maricela Contreras dijo que los cambios al Cofipe no van a evitar otro fraude, como el ocurrido en 2006, por lo que invitó a sus compañeros del PRD a que abandonaron el salón de plenos. La primera que respaldó la propuesta fue Valentina Batres y cerca de 38 más se retiraron del recinto.
Aleida Alavez, quien también dio la batalla contra el Cofipe, subió a la tribuna antes de retirarse para reclamar a los diputados del PAN que pusieran atención en lo que estaban aprobando. En respuesta, los panistas le silbaron. La legisladora perredista pidió entonces a Zavaleta que saliera en su defensa y solicitara respeto a los diputados del PAN, pero la presidenta de la Mesa Directiva, que en todo momento se mantuvo hostil contra sus propios compañeros de partido, intentó callarla. Molesta, Alavez la ignoró y no soltó el micrófono.
* Diputados de Convergencia, PT y PRD abandonan el recinto
México, D.F., 11 de diciembre (apro). En protesta por la forma “arbitraria” y “autoritaria” con la que la perredista Ruth Zavaleta condujo la sesión en la que se aprobaron las reformas al Cofipe, 17 diputados de Convergencia y 11 del Partido del Trabajo abandonaron el salón de plenos poco antes de la votación en lo particular.
En solidaridad, hicieron lo propio los 40 legisladores del PRD que votaron en contra de las modificaciones al Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe).
Los diputados de Alternativa y Nueva Alianza decidieron continuar en el salón, para defender sus puntos de vista.
Antes de retirarse, la diputada del PRD, Aleida Alavez, pidió el uso de la palabra para cuestionar la actitud de los diputados que aprobaron las reformas al Copife. Los panistas le silbaron y la presidenta de la Mesa Directiva, Ruth Zavaleta, intentó callarla. Alavez no lo permitió y siguió adelante, en medio de la rechifla de los panistas.
Durante la discusión de las más de 100 reservas de los partidos Convergencia, PT, Nueva Alianza y Alternativa, Zavaleta se negó en varias ocasiones a revisar si aún existía el quórum necesario para continuar la sesión.
El primero en solicitar la revisión de quórum fue Manuel Cárdenas, de Nueva Alianza. Zavaleta se negó a proceder con el argumento de que hubo un acuerdo del pleno de la Cámara de Diputados donde se obliga a los diputados a estar presentes solo cuando hay votación, no cuando hay discusión.
Layda Sansores, de Convergencia, así como Manuel Cárdenas y la propia Valentina Batres, del PRD, refutaron a Zavaleta. Le hicieron notar que un acuerdo no está por encima del Reglamento interno de la Cámara de Diputados.
Sin embargo, Zavaleta defendió su criterio, apoyada en el artículo 105 que, dijo, la faculta para que determine qué forma parte de un debate y qué no. Amparada en esa tesis, calló literalmente a más de un diputado de Convergencia.
Ricardo Cantú, del PT, pidió el uso de la palabra luego para censurar que las reformas al Copife hayan sido aprobadas por los tres partidos mayoritarios. Dijo que se trata de una reforma excluyente y dijo que por esa razón abandonaba el salón de sesiones.
No fue el único que hizo patente su inconformidad. Tres diputadas de Nueva Alianza, encabezadas por Mónica Arreola, hija de la presidenta del SNTE, Elba Esther Gordillo, sacaron una manta que decía: “No validamos la inconstitucionalidad de esta reforma”.
La tónica de la larga sesión de hoy en la Cámara de Diputados fue de un constante reclamo a la corriente Nueva Izquierda y del manifiesto encono entre los perredistas allegados a Andrés Manuel López Obrador, con la presidenta de la Mesa Directiva, Ruth Zavaleta.
También, por los constantes señalamientos de que algunos cambios al Cofipe violentan la Constitución.
Los diputados opositores ilustraron lo anterior con un ejemplo: explicaron que la Constitución dice que todo mundo tiene derecho a votar y a ser votado y que el voto es secreto e intransferible. Según ello, la cláusula de vida eterna que aprobaron pristas, panistas y la corriente NI del PRD se contrapone con el principio constitucional.
La diputada perredista Maricela Contreras dijo que los cambios al Cofipe no van a evitar otro fraude, como el ocurrido en 2006, por lo que invitó a sus compañeros del PRD a que abandonaron el salón de plenos. La primera que respaldó la propuesta fue Valentina Batres y cerca de 38 más se retiraron del recinto.
Aleida Alavez, quien también dio la batalla contra el Cofipe, subió a la tribuna antes de retirarse para reclamar a los diputados del PAN que pusieran atención en lo que estaban aprobando. En respuesta, los panistas le silbaron. La legisladora perredista pidió entonces a Zavaleta que saliera en su defensa y solicitara respeto a los diputados del PAN, pero la presidenta de la Mesa Directiva, que en todo momento se mantuvo hostil contra sus propios compañeros de partido, intentó callarla. Molesta, Alavez la ignoró y no soltó el micrófono.