TIEMPO DE ALACRANES
Hugo Sánchez Gudiño
Que quede claro, ahorita no hablan la suegra y el yerno, sino la dirigente y el subsecretario. ¿Cuál es el reto de la educación básica?”.
(De Gordillo a su yerno Fernando González, El Universal, 18-Dic-2006.)
Como personaje de telenovela, la liendre Gordillo amaneció en 2007 convertida en la Fea Más Bella, consolidando su estructura feudal-familiar de poder, una especie de cosa nostra o hermandad gordillista cuyos propósitos son la venta de la estabilidad, el control, el chantaje y la corrupción.
Así, Felipe Calderón la ha recompensado y en el año que inicia la familia Gordillo ha ampliado sus tentáculos de influencia: Con más de 50 legisladores en la Cámara de Diputados; nueve diputados de Nueva Alianza; los otros se ubican en las diferentes bancadas como el neopanista Benjamín González Roa ro; en el Senado está Rafael Ochoa, secretario general del SNTE y la chiapaneca María Elena Orantes.
Entre los gobernadores cercanos a la liendre Gordillo se encuentran: Humberto Moreira (Coahuila); J. Reyes Baeza (Chihuahua); Ney González (Nayarit); Eugenio Hernández (Tamaulipas); Eduardo Bours (Sonora); Natividad González (Nuevo León); Silverio Cavazos (Colima); Ismael Hernández (Durango); y Jesús Aguilar (Sinaloa).
Asimismo, presume su relación con Lazarito Cárdenas Batel (Michoacán).
Presidenta vitalicia del SNTE que cuenta con un millón 350 mil agremiados, el más grande de América Latina, Gordillo también se encuentra de plácemes porque algunos de sus incondicionales quedaron colocados estratégicamente en la nómina gubernamental: Miguel Ángel Yunes en el ISSSTE; Roberto Campa, en la Secretaría Técnica del Sistema Nacional de Seguridad Pública; y Tomás Ruiz (el ex terrorista fiscal que fue cesado de la SHyCP por dar el pitazo, es decir por deslealtad y traición, de la jubilación del titular de Hacienda –según documentó el Cisen en febrero del año 2000–) quien fue impuesto como dirigente del Panal compartiendo créditos con el bofe Kahwagi.
Pero el nombramiento que detonó un escándalo nacional fue el de su yerno, José Fernando González Sánchez (esposo de Maricruz Montelongo, hija de Gordillo) en la subsecretaría de Educación Básica, que Elbita negoció directamente con Calderón, como condición para renunciar a que uno de sus subalternos ocupara la SEP y aceptar a Vázquez Mota como titular de la misma.
Área estratégica en el crucigrama de la dependencia por el número de integrantes el SNTE a ella adscritos (casi 800 mil), tendrá la misma agenda para el yerno y para la suegra. Aunque Fernandito González lo explica de esta manera: “Los dos sabemos que mi lealtad es con el presidente Calderón. En el ámbito familiar seguirá siendo la suegra cariñosa, la abuela adorable que nos pide permiso para echar a perder a nuestro hijo, porque lo adora, se adoran, y es muy consentidora”.
Siempre a la sombra de su suegra, Fernandito fue director del Instituto de Capacitación y Formación Política del PRI cuando Gordillo era secretaria general, y se desempeñó como asesor de su suegra en el Instituto de Investigación de América Latina para Educadores pagado por el sindicato magisterial. Aunque en realidad se le considera el administrador y reorganizador de bienes y propiedades de Gordillo al formar un fideicomiso familiar (autorizó créditos irregulares del Fovissste).
Fernandito y su esposa (la hija de Gordillo) son dueños de una agencia de publicidad que le vende los boletos de avión, la logística, la organización de banquetes y la imagen al propio SNTE. También se le ubica como gestor de créditos para que los hermanitos Bribiesca pudieran vender las casas de los conjuntos Milenio, ubicadas en Acapulco.
Promotora de la creación de una nueva sección sindical en Oaxaca, la 59, que competirá con la 22 por la filiación de cerca de 55 mil mentores, y convencida de que le dará el tiro de gracia a Enrique Rueda Pacheco (“Con dinero baila el perro”, dijo orgullosa cuando el líder magisterial traicionó a la APPO, aceptando negociar con Gobernación por “un puñado de billetes”), Elba Esther Gordillo se prepara también para obstaculizar la pretensión de Roberto Madrazo de imponer a Javier Oliva como su candidato y próximo presidente nacional del PRI (marzo-2007), que tendrá la difícil tarea de re! posicion ar al tricolor en las elecciones legislativas federales de 2009.
“Confieso que los traidores a la República pudieron más que yo” –publicó en todos los diarios de circulación nacional en diciembre de 2005–, amenazando a los Robespierre de caricatura que se interpusieran en su camino. Hoy de nueva cuenta, la liendre Gordillo regresa más carroñera que nunca para vender protección y consolidar su cacicazgo con la anuencia de Felipe Calderón, quien mentirosamente prometió en campaña un Gobierno de manos limpias, sin nepotismos y compadrazgos.