Por si algo faltara...
Diario Libertad / Julio Ricardo Blanchet Cruz
Todos (hasta Calderón, lo que ya es decir mucho) sabíamos que la batalla contra el narcotráfico estaba perdida, desde antes que empezara; pero don Felipe no regresará al Ejército a sus cuarteles, no obstante la paliza que le están dando...
Pues a pesar de decomisos, operativos, balaceras, detenciones, muertes y deportaciones, la droga sigue en las calles al alcance de cualquier celular, y a domicilio...
Un poco más cara la droga, eso sí; pero nada ha cambiado. Las drogas son un negocio en efectivo, es decir, no hay crédito (cualquiera se atreve a no pagar) y la cantidad de dinero que manejan es absolutamente incalculable...
Por no comentar acerca de la inseguridad que se vive, que en solo 24 horas hubo 23 ejecutados por varias partes de la República...
Por lo que todo lo que digan los “enterados”, es poco en comparación a la realidad. El negocio es de fábula, casi comparable con el sueño americano de hacerse rico de la noche a la mañana; y sin mucho esfuerzo que digamos...
El narcotráfico es un poder capaz de comprar a Presidentes y clérigos; cuanto más agentes federales, a los que por si algo faltara, no les pagan. Como los que llegaron a Nuevo León, que sin sueldo, amenazaron con pasarse del lado de los narcotraficantes...
Y bien sabe don Felipe que la única solución viable y decorosa para que el Ejército no salga tan mal parado ante los ojos del Pueblo, es que se despenalice el uso de las drogas...
En cuyo caso, el Ejército ya no tendría nada que hacer en las calles y habría de regresarse a los cuarteles...
Solo que los lineamientos que sigue don Felipe no son esos, a él las muertes de soldados y civiles le vienen valiendo, él sigue los lineamientos de autorizar una base norteamericana en la frontera con Guatemala (una especia de Guantánamo) de especial posición estrategia...
Y de dejar que siga la “goliza” en todo su apogeo, para que los marines intervengan y garanticen la seguridad de sus conciudadanos y de sus múltiples intereses y cuantiosas inversiones....
Como lo hacen con sus buques de guerra con los que ya patrullan el Golfo de México; por supuesto, según dicen ellos, para evitar actos terroristas como los que han habido en el pasado...
Sin soslayar que esos actos terroristas han sido debidamente preparados y calculados; como el hundimiento del barco de lujo inglés, el “Lusitania”, que los “obligó” a entrar a la Primera Guerra Mundial...
Hasta las Torres Gemelas, cuyo derribo más pareció una demolición controlada que un acto terrorista...
Pasando por el bombardeo a Perl Harbor, que los “forzó” a entrar a la Segunda Gran Guerra; y las armas de destrucción masiva que tenía Saddam Hussein y que finalmente nunca existieron; pero sirvieron de pretexto para invadir Afganistán y a Irak...
Aquí el pretexto será garantizar la seguridad en contra de los narcotraficantes, que dentro de poco serán debidamente llamados terroristas, al igual que a los guerrilleros ya se les nombra...
¡Total! un pronóstico de terror al que podemos revertir si los mexicanos nos decidimos a tener jueces honestos que sean electos por el Pueblo (como ayer argumentamos en este mismo espacio)...
O en su defecto si lleváramos a cabo un boicot a la Coca-Cola y a los religiosos cristianos (siempre tan necesitados de dinero) cuya farsa está más que documentada en Don Sata...
A nuestros amigos que nos hacen el favor de leernos en Tiempo, favor de ir a Diario Libertad en Internet; cuestión de hacer un clic y desengañarse de una buena vez por todas...
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.
Todos (hasta Calderón, lo que ya es decir mucho) sabíamos que la batalla contra el narcotráfico estaba perdida, desde antes que empezara; pero don Felipe no regresará al Ejército a sus cuarteles, no obstante la paliza que le están dando...
Pues a pesar de decomisos, operativos, balaceras, detenciones, muertes y deportaciones, la droga sigue en las calles al alcance de cualquier celular, y a domicilio...
Un poco más cara la droga, eso sí; pero nada ha cambiado. Las drogas son un negocio en efectivo, es decir, no hay crédito (cualquiera se atreve a no pagar) y la cantidad de dinero que manejan es absolutamente incalculable...
Por no comentar acerca de la inseguridad que se vive, que en solo 24 horas hubo 23 ejecutados por varias partes de la República...
Por lo que todo lo que digan los “enterados”, es poco en comparación a la realidad. El negocio es de fábula, casi comparable con el sueño americano de hacerse rico de la noche a la mañana; y sin mucho esfuerzo que digamos...
El narcotráfico es un poder capaz de comprar a Presidentes y clérigos; cuanto más agentes federales, a los que por si algo faltara, no les pagan. Como los que llegaron a Nuevo León, que sin sueldo, amenazaron con pasarse del lado de los narcotraficantes...
Y bien sabe don Felipe que la única solución viable y decorosa para que el Ejército no salga tan mal parado ante los ojos del Pueblo, es que se despenalice el uso de las drogas...
En cuyo caso, el Ejército ya no tendría nada que hacer en las calles y habría de regresarse a los cuarteles...
Solo que los lineamientos que sigue don Felipe no son esos, a él las muertes de soldados y civiles le vienen valiendo, él sigue los lineamientos de autorizar una base norteamericana en la frontera con Guatemala (una especia de Guantánamo) de especial posición estrategia...
Y de dejar que siga la “goliza” en todo su apogeo, para que los marines intervengan y garanticen la seguridad de sus conciudadanos y de sus múltiples intereses y cuantiosas inversiones....
Como lo hacen con sus buques de guerra con los que ya patrullan el Golfo de México; por supuesto, según dicen ellos, para evitar actos terroristas como los que han habido en el pasado...
Sin soslayar que esos actos terroristas han sido debidamente preparados y calculados; como el hundimiento del barco de lujo inglés, el “Lusitania”, que los “obligó” a entrar a la Primera Guerra Mundial...
Hasta las Torres Gemelas, cuyo derribo más pareció una demolición controlada que un acto terrorista...
Pasando por el bombardeo a Perl Harbor, que los “forzó” a entrar a la Segunda Gran Guerra; y las armas de destrucción masiva que tenía Saddam Hussein y que finalmente nunca existieron; pero sirvieron de pretexto para invadir Afganistán y a Irak...
Aquí el pretexto será garantizar la seguridad en contra de los narcotraficantes, que dentro de poco serán debidamente llamados terroristas, al igual que a los guerrilleros ya se les nombra...
¡Total! un pronóstico de terror al que podemos revertir si los mexicanos nos decidimos a tener jueces honestos que sean electos por el Pueblo (como ayer argumentamos en este mismo espacio)...
O en su defecto si lleváramos a cabo un boicot a la Coca-Cola y a los religiosos cristianos (siempre tan necesitados de dinero) cuya farsa está más que documentada en Don Sata...
A nuestros amigos que nos hacen el favor de leernos en Tiempo, favor de ir a Diario Libertad en Internet; cuestión de hacer un clic y desengañarse de una buena vez por todas...
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.