De la hipocresía social y el puritanismo.

Diario Libertad /Editorial

El linchamiento mediático-social de que ha sido objeto la diputada veracruzana que filmó una película en la que se desnudó, revela el grado de hipocresía que se vive en nuestra sociedad; y lo falso que resulta en nuestro México la igualdad de género.

En las pasadas elecciones en Baja California, quien es hoy el Presidente Municipal, fue “captado” y exhibido en un video teniendo relaciones sexuales con dos mujeres (ninguna de ellas su esposa) y según el líder del PRD, eso le sirvió para captar más votos femeninos (¡!).

No ha sido la única diputada o senadora que ha enseñado o medio enseñado sus encantos. Irma Serrano hizo historia y no tuvo empacho en mostrar la dermis y los folículos pilosos. Cristian Martell también se mostró desnuda en un filme y se casó con el hijo de su amante sin que la sociedad la criticara en lo más mínimo.

De recordar a las tres damas de la pasada legislatura del DF que posaron de manera sugestiva ante las cámaras, solo que tuvieron que seguir en la política por sus escasos atributos (pero ganas no les faltaron).

En Italia la “Chicholina” fue famosa legisladora por su basta morfología que bondadosamente enseñaba; y Karla Bruni, la hoy esposa del pseudo-populista Sarkozy, no se ha quedado atrás en eso de lucir las buenas formas.

Poco caballeros han sido los hombres que se han atrevido a censurarla; mas el hecho ha demostrado lo que puede hacer la envidia y que los refranes tienen mucho de cierto, pues quedó demostrado que el peor enemigo de la mujer, como siempre se ha dicho, es la mujer.

Pero en el fondo es solo hipocresía social y puritanismo religioso, pues difícilmente alguien tiene la mano lo suficientemente limpia como para lanzar la primera piedra.