ESTO... SOLO EN MEXICO SUCEDE, Y LOS MEXICANOS PERMITIENDOLO
josé gil olmos
México, D.F., 8 de agosto (apro).- Elba Esther Gordillo está imparable y, aunque los panistas se nieguen a reconocerlo, la victoria que tuvieron en Baja California se debe en mucho a ella, quien no tardará en pedir la cabeza de Josefina Vázquez Mota, aún titular en Educación Pública, como muestra de agradecimiento a su trabajo.
Previo a la elección en Baja California, la maestra dio este mensaje a través de una entrevista con el periodista de El Universal, Raymundo Riva Palacio, en la cual criticó duramente a Vázquez Mota y la tildó de ignorante de la educación.
La entrevista se realizó en su casa de San Diego, California, del otro lado de la frontera colindante precisamente con Tijuana. Nunca antes la maestra había permitido la entrada de algún medio a su búnker. Fue evidente que la entrevista fue pactada para mandar el mensaje que ella quería, quitar de en medio a la secretaria de Educación, quien a través de otro periódico, Reforma, se ha dedicado a golpearla haciendo evidente el daño que le ha hecho a la calidad de la educación básica mediante el control caciquil del SNTE.
El 5 de agosto pasado la maestra Gordillo repitió la misma fórmula aplicada en los comicios del 2 de julio del 2006. Operó una estrategia de “ingeniería electoral” para hacer ganar al panista José Guadalupe Osuna Millán, como lo hizo un año antes para darle la victoria a Felipe Calderón.
Dos fueron sus mecanismos de operación: de un lado la estructura del SNTE. Los maestros no sólo sirvieron para inhibir a los operadores priistas de Jorge Hank Rhon, sino que realizaron una labor de movilización sin precedente para una elección local. Los secretarios generales de diez entidades comandaron a miles de mentores que salieron por la tarde del domingo y le dieron la vuelta a los comicios mediante el acarreo de votantes seleccionados previamente con lista nominal del IFE en mano.
El segundo instrumento fue el Partido Nueva Alianza (Panal). Así como lo hizo en la elección presidencial del 2006, en Baja California utilizó el nombre de este partido para inclinar las fuerzas políticas en favor del candidato del PAN y, al mismo tiempo, lograr un espacio que no tenía en el Congreso legislativo. Es decir, que ya logró posicionarse con un par de diputados locales y eso será un elemento en la balanza de negociaciones futuras.
La fórmula aplicada por la maestra en favor del blanquiazul en ambas elecciones podría ser utilizada en el futuro, y no se descarta que quiera operar nuevamente en los comicios de Michoacán, a realizarse el 11 de noviembre próximo.
La maestra, usando su propio método mayéutico, está induciendo al panismo a un grado de confusión y de ilusionismo, haciéndole ver que ella es la puerta para su fortalecimiento, sobre todo el del calderonismo, frente a un PRI que aún no se repone de las últimas derrotas electorales a nivel presidencial, y ante un perredismo que se ha dividido entre los seguidores de Andrés Manuel López Obrador y las tribus tradicionales.
Elba Esther Gordillo ya encontró el camino de su fortalecimiento político y electoral, a través de la debilidad de sus adversarios y la de sus propios aliados temporales, los panistas, que aun cuando tienen el poder en sus manos, no saben todavía cómo operarlo en los comicios.
Como si fuera un partido de futbol, panistas, priistas y perredistas tendrían que estar estudiando a detalle las jugadas que desplegaron la maestra y su equipo de miles de maestros en las elecciones del 2 de julio del 2006 y las del 5 de agosto pasado en Baja California.
Ver con detenimiento cómo ha utilizado la estructura no sólo del magisterio sino la del propio Instituto Federal Electoral (IFE), que de alguna manera se encuentra empalmada si tomamos en cuenta que, según estimaciones de propios operadores elbistas, la mitad de los funcionarios electorales de todo el país son miembros del SNTE.
Pero sobre todo no caer en el mismo error que han cometido en estas dos elecciones, menospreciar su talento natural de organización, el peso que tiene en el sindicato y el poder político que ha adquirido mediante sus relaciones con varios gobernadores y sus posiciones estratégicas en el equipo de Calderón, donde ahora quiere avanzar más pidiendo la cabeza de la titular de Educación Pública, un espacio de poder que siempre ha querido tener en sus manos.