Y EN QUE NO HA FRACASADO FeCAL?
MacheTearTe
La segunda gran reforma del gobierno de Felipe de Jesús Calderón Hinojosa fue presentada a la Comisión Permanente del Congreso de la Unión con más pena que gloria.
La primera fue la reforma a la Ley del ISSSTE que aún mantiene en las plazas, calles, puentes internacionales y casetas de cobro de autopistas --quebradas por sus dueños, rescatadas con recursos de la sociedad por el gobierno y que nuevamente concesionará a particulares Calderón Hinojosa--, un vigoroso movimiento social de rechazo que Javier Lozano Alarcón y Francisco Javier Ramírez Acuña presionan públicamente a Marcelo Ebrard Causabón para que los plantones, marchas y manifestaciones en el Distrito Federal sean sometidos con el uso de la fuerza pública capitalina.
Los subordinados de Calderón fingen demencia sobre un dato más que revelador: 90 por ciento de las movilizaciones que se realizan en el Distrito Federal son en protesta por políticas y decisiones federales y de los gobiernos de los estados que no atienden los reclamos de los ciudadanos.
La ineptitud de los gobernantes es completamente proporcional con la naturaleza absurda de no pocas de sus decisiones y propuestas. Sólo ello podría explicar que el espray, uno de los principales insumos del movimiento social y medio de expresión de la insatisfacción de la banda y la creatividad juveniles en México y la aldea global, contemple Agustín Carstens Carstens que pague un gravamen de 50 por ciento.
Realizar pintas con aerosol podría convertirse en un lujo. Y todo porque el movimiento grafitero y las proclamas en paredes le irritan al “gobierno de las leyes y del empleo”, tanto como le sucedía a Ernesto Zedillo Ponce de León , quien ordenaba al primer círculo de sus colaboradores que las mandaran tapar.
La preeminencia de la pena en demérito de la gloria, se evidenció desde la llegada de Carstens a Xicoténcatl. Es el funcionario que según Andrés Manuel López Obrador le cuesta al erario 5 mil pesos diarios sólo por concepto de alimentos.
Manlio Fabio Beltrones Rivera y los demás legisladores priístas, integrantes de la Mesa Directiva de la Comisión Permanente , brillaron por su ausencia porque además de que se les marginó de la negociación previa, conocieron los alcances de las propuestas de reforma --¿o miscelánea?-- fiscal por los medios de comunicación social a los que, al más viejo estilo de la monárquica pareja presidencial, se les filtró.
El diputado tamaulipeco Marco Antonio Bernal Gutiérrez acusó recibo de la conducta del titular del Ejecutivo: “Esa fue una actitud que se siguió mucho en el sexenio pasado para presionar al Congreso; es una actitud que rechazamos”.
Una consecuencia inmediata del desaseo con que actuaron los operadores políticos del michoacano y del jalisciense, entre ellos Armando Salinas Torre –el hombre del maletín en la Procuraduría General de la República , en tiempos de Antonio Lozano Gracia --, es que nadie con capacidad de decisión en las bancadas de los partidos de la Revolución Democrática y Revolucionario Institucional se compromete con impulsar un periodo extraordinario de sesiones.
Y todo esto es sólo en materia de las formas, sin entrar a los bemoles de la polémica sustancia que contiene –y sobre todo lo que omite-- el paquete fiscal de Felipe de Jesús Calderón.
Naturalmente que las cartas de los gobernadores Mario Marín Torres y Ulises Ruiz Ortiz , bajo investigación de la Suprema Corte de Justicia de la Nación , resultan invaluables para que el ofendido priísmo por descuidos en las formas nada republicanas, reconsidere su conducta de agraviado y acaso hasta para que se disponga a respaldar, con los ajustes del caso, la sustancia de una reforma que, de entrada, deja la impresión de que podríamos estar ante una miscelánea fiscal. Pero éste es otro tema, para otra ocasión.