LOS BENEFICIADOS DEL SEXENIO DEL PROzac
verónica espinosa
León, Gto., 4 de junio (apro).- Empresarios leoneses obtienen su propia cosecha de las relaciones que durante la gubernatura y el sexenio presidencial cultivaron con Vicente Fox, su esposa Marta Sahagún y los hijos de ésta, principalmente Manuel Bribiesca, así como de la cercanía con el actual gobernador Juan Manuel Oliva Ramírez, a quien apoyaron en su campaña.
En medio de varias acusaciones por despojo que lo llevaron, incluso, a pisar la cárcel a principios del año pasado, el constructor y empresario inmobiliario Oscar Flores Pérez, a través de uno de sus negocios, Grupo Floper, ha adquirido miles de hectáreas en la populosa zona de Las Joyas y en varios ejidos del rumbo, justo donde ya comenzó a trabajarse en la traza preliminar del proyecto Río Verde o El Zapotillo, una obra federal comprometida por Vicente Fox para garantizar el abasto de agua para los leoneses.
La adquisición parecería casual si Flores Pérez –expresidente de la Cámara Nacional de Desarrolladores de Vivienda, (Canadevi)-- no se hubiera asociado se haya asociado, cinco años atrás, con personajes también cercanos al expresidente y conocedores del proyecto de Río Verde, como Arturo Sojo Garza Aldape, hermano del secretario de Economía, uno de los promotores de éste y otros planes que se elaboraron desde que Fox fue gobernador de Guanajuato y Eduardo Sojo su coordinador de proyectos estratégicos.
En el grupo de socios se incluye al expresidente de la Concanaco, Hugo Villalobos González, quien en la segunda mitad del sexenio foxista fungió como intermediario –en apoyo de Los Pinos y del gobierno de Guanajuato-- en las negociaciones para destrabar y formalizar con el gobierno jalisciense los acuerdos para arrancar las obras de El Zapotillo.
Hugo Villalobos fue ampliamente reconocido por el propio Fox, el exgobernador guanajuatense Juan Carlos Romero y su sucesor Juan Manuel Oliva por sus gestiones “como ciudadano” –pero ampliamente respaldado por ambas instancias-- en diversos eventos oficiales relacionados con la presentación del proyecto y firma de acuerdos para comenzar las obras de El Zapotillo, antes de concluir el sexenio foxista.
Desde septiembre del 2002, Hugo Villalobos se unió a Oscar Flores y Arturo Sojo en una sociedad financiera de objeto limitado (Sofol), denominada “Sociedad Corporativa H.P., S.A. de C.V.”, junto con otros prominentes empresarios leoneses como Luis Rodrigo González Fuentes, David González Flores, Héctor Rodríguez Aparicio, y el editor y actual presidente de la Canacintra local, Adolfo Rezza San Martín.
De acuerdo con el acta constitutiva obtenida del Registro Público de la Propiedad (copia de la escritura 17,691) la Sociedad Corporativa H.P. se conformó con un capital inicial de 255 mil pesos, de los cuales poco más de 130 mil fueron aportados por Oscar Flores y Adolfo Rezza, mientras que el resto, por los otros diez socios. El consejo de administración quedó encabezado por el propio Flores Pérez como presidente; Rezza San Martín como vicepresidente y Hugo Villalobos como tesorero. Los tres, junto con el director general Eduardo José Arroyo, recibieron poder general judicial con amplias facultades.
En junio del 2004 la Sofol recibió la autorización de la Secretaría de Hacienda para operar, con el nombre de Corporación Hipotecaria, que para entonces ya había aumentado su capital de 255 mil a 32 millones y medio de pesos. En noviembre del 2005, se celebró la asamblea extraordinaria en la que los socios acordaron otro incremento de 4 millones y medio de pesos más, de acuerdo con documentos del Registro Público de la Propiedad consultados por Apro.
Corporación Hipotecaria se dedica a otorgar créditos para la adquisición de vivienda nueva o usada, así como a obtener créditos para la construcción de vivienda para personas físicas o morales.
A nombre de esta Sofol aparecen obras de vivienda en Morelos (condominio Rancho Las Palmas) y en Campeche (Quinta Los Españoles).
Sin embargo, a través de Grupo Floper, la constructora que dirige Oscar Flores, se adquirieron miles de hectáreas entre la zona de Las Joyas y la autopista León-Lagos-Aguascalientes, las cuales --ahora se sabe-- quedan comprendidas en la infraestructura que desde la presa El Zapotillo, en Jalisco, conducirá el agua hasta León.
El Zapotillo involucra una inversión superior a los 7 mil millones de pesos, recursos que, según se informó a principios de noviembre en la firma de los acuerdos, quedaron depositados en un fideicomiso manejado por Banobras. Se trata de una obra hidráulica que almacenará 411 millones de metros cúbicos; la cortina se elevará a 80 metros de altura, y canalizará 5.6 metros cúbicos de agua por segundo.
En un recorrido efectuado por los terrenos adquiridos por Grupo Floper, en ejidos como Corral de Piedra, La Barranca y Barranca del Venadero, ejidatarios y vecinos de las comunidades –como el delegado Gabino Becerra-- atestiguaron que personal técnico de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) tiene algunos meses acudiendo a esta zona a marcar el trazo de la conducción del agua de El Zapotillo a León, lo cual puede comprobarse también con las placas que ya están colocadas a lo largo del camino entre estos ejidos.
Certificados parcelarios entregados en el 2004 por Vicente Fox a ejidatarias de Corral de Piedra, de forma inusitada definen desde entonces las colindancias de ejidatarios con la inmobiliaria y constructora Floper.
Aviones, estadios y campañas
En la prensa local, Oscar Flores Pérez y Adolfo Rezza Sanmartín han sido señalados por su relación con el hijo mayor de Marta Sahagún, Manuel Bribiesca.
Al menos en el caso de Flores Pérez hay hechos que fundamentan esta versión. Fue en el hangar de su propiedad, ubicado en el Aeropuerto Internacional del Bajío, donde permaneció guardado por varias semanas el avión Jet Lear de Manuel Bribiesca, y donde se le tomó la fotografía que publicaron el diario A.M. de León y la revista Proceso, al confirmar que era utilizado por el hijo mayor de Marta Sahagún para sus múltiples viajes.
Tras el encarcelamiento de Carlos Ahumada, propietario del club de futbol León, y de la intervención de la Secretaría de Hacienda, Rezza se hizo cargo durante algunos meses de la administración y manejo del equipo y promovió negociaciones con empresarios locales para la adquisición del mismo, entre los que también se mencionó a Manuel Bribiesca, cuyo nombre, incluso, apareció entre las firmas de apoyo al equipo en desplegados periodísticos.
En varias ocasiones Carlos Ahumada y sus conocidos en León –entre ellos Bribiesca-- arribaron en el helicóptero del empresario constructor a los terrenos aledaños a Las Joyas, donde en algún momento se habló de la posibilidad de construir un nuevo estadio para el equipo de fútbol León, según versiones de empresarios que estuvieron interesados en adquirir la franquicia luego de que el empresario argentino fue encarcelado.
Posteriormente, en el proceso electoral del 2006, Oscar Flores y Adolfo Rezza aparecieron y coordinaron contactos empresariales y recaudaciones de campaña en este sector para Juan Manuel Oliva.
Sin embargo, el Comité Estatal del PAN y los coordinadores de campaña del equipo del ahora gobernador debieron asumir el manejo financiero y de recaudación para la campaña, ante inconformidades que surgieron al interior del partido y entre otros representantes del sector empresarial.
Historia de denuncias
Lo cierto es que desde hace por lo menos una década, Oscar Flores, y sus empresas, ha sido denunciado infructuosamente por la adquisición de predios mediante documentos apócrifos o engaños a los propietarios, y hasta por el desvío del cauce de un arroyo federal para aprovechar una mayor extensión de terreno para, de forma indebida, construir viviendas en las laderas de dicho cauce, en la actual colonia Kennedy.
En varios escritos firmados por el abogado Guillermo Romo Méndez, y dirigidos al exalcalde Ricardo Alanís, se exponen varios hechos, como el que señala que mediante escrituras públicas se protocolizaron juicios de información ad perpetuam, las cuales Flores Pérez permutó luego con el municipio.
Por ejemplo, la escritura número 35,872 del 26 de febrero de 1999, y la número 38,572, del 23 de abril del 2001, ambas ante la notaría de Francisco Fernández Regalado, aunque aparentemente se refieren a predios distintos, en realidad corresponden a un mismo procedimiento de información ad perpetuam; es decir, a un mismo caso: el expediente 385/97-C del Juzgado Tercero de lo Civil.
Con estas escrituras se procedió a fusionar varios predios, previa permuta hecha por bienes del patrimonio municipal autorizado por el ayuntamiento en febrero del 2003. “Mediante engaños y de forma dolosa a través de escrituras apócrifas (Oscar Flores) obtuvo un beneficio económico en detrimento de los bienes municipales… a través de dichas documentales, mismas que por razones extrañas no fueron o no quisieron ser analizadas, este sujeto obtuvo el pago de afectaciones que legalmente no le correspondían”.
El abogado Romo Méndez presentó al exalcalde de León Ricardo Alanís Posada evidencias de los abusos cometidos por Oscar Flores y su empresa Flopper en perjuicio del patrimonio y del erario municipal.
Alanís Posada rechazó atender el caso y proceder jurídicamente, en virtud de que su hijo Ricardo Alanís Rosales, en su calidad de regidor, intervino en algunos de los dictámenes para permutar los predios municipales con Flores.
Consultado sobre estas denuncias, el abogado Romo Méndez –representante del señor Sabás Guardado, quien fue engañado por Oscar Flores y despojado de una propiedad-- recordó cómo durante la campaña del 2006, Juan Manuel Oliva Ramírez no sólo fue respaldado amplia y públicamente por Flores Pérez y Adolfo Rezza, sino que aquél, en su calidad de presidente de la Canadevi, le organizó varias reuniones con constructores, en las que ya lo calificaban como virtual gobernador, y de paso le pedía convertir al gobierno en un “facilitador” de la construcción de viviendas. Recientemente, el abogado llevó el caso ante el gobernador, y aún espera una respuesta.
Otro abogado, Carlos Torres –quien también conoce los expedientes de diversas denuncias contra Flores-- asegura que todo esto es del conocimiento del gobernador Oliva, “pero el constructor ha actuado impunemente porque es protegido por él”.
Unos meses después, ya con Oliva Ramírez en el gobierno, lo primero que se instrumentó a través del Instituto de Vivienda del estado (IVEG) fue un encuentro con los socios de la Canadevi encabezados por Oscar Flores, para “trabajar juntos” en la entrega de reservas territoriales a constructores para edificar viviendas para personas de bajos recursos, principalmente.
La empresa de Flores resultó favorecida por el IVEG en la construcción del desarrollo habitacional “Cañada del Real”, en la zona de Las Joyas, donde levantará 1,600 departamentos en 83 edificios de cinco pisos en 18 hectáreas, que también prevén contar con canchas, centro comercial, áreas verdes y escuelas. La inversión fue calculada en cerca de 300 millones de pesos. El terreno lo puso el Instituto de Vivienda.
Oscar Flores no perdió el tiempo. En noviembre pasado, en su calidad de presidente de la Canadevi, le entregó a Vicente Fox un reconocimiento “por su exitosa política de vivienda”.
Mientras el abogado Guillermo Romo espera todavía que Oliva lo reciba en el Palacio de Gobierno.