EL PROzac Y FeCAL DEBERIAN DE IR A LA CARCEL POR TRAMPOSOS

emeequis
Por Fátima Monterrosa
fatima@eme-equis.com.mx

Para Lorenzo Córdova no existe ninguna duda: Vicente Fox cometió un gran pecado durante su sexenio: “Tomó decisiones de Estado con base en resultados de encuestas y no resolvió los problemas mediante acciones políticas”.

El investigador universitario, adscrito al Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, considera también que Fox se convirtió en una especie de “actor de televisión”. “Tuvo un gran pecado con las encuestas. Cometió un acto más de incontinencia; acabó dándoles demasiado peso. Las decisiones políticas deben ser más complejas, no sólo actuar como la gente quiere. Las encuestas pueden ser un instrumento para la toma de decisiones, pueden ser útiles, pero no para resolver problemas políticos y sociales”.

El especialista en derecho añade que el ex mandatario no sólo abusó de las encuestas, sino que además relegó las decisiones que tenía que tomar como Presidente a los vaivenes de la opinión pública.

Lorenzo Córdova, quien ha basado sus líneas de investigación en derecho electoral y partidos políticos, dice que la información de emeequis, al presentar los contenidos de las encuestas que aplicó la Presidencia de la República, confirman la arbitraria aplicación de sondeos a la opinión pública.

“Este tipo de encuestas poco tiene que ver con la toma de las decisiones públicas. Sin querer especular, hacen suponer… en todo caso, poner en duda la finalidad real. No es una finalidad en primer instancia de gobierno, sino una serie de consultas a la ciudadanía sobre estrategias que tienen que ver con la campaña de Felipe Calderón”.

Y por si fuera poco, el año pasado el Presidente se convirtió en un factor peligroso y desequilibrante del proceso electoral: “Si se constatara que estas encuestas fueron turnadas al PAN o al equipo de campaña de Felipe Calderón para generar elementos adicionales para la estrategia de campaña, estamos abiertamente ante una aportación de una persona prohibida y sancionada gravemente por la propia ley”.

El especialista en derecho electoral establece que Fox como titular del Ejecutivo violó el artículo 49 del Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe). Por ello, las personas afectadas por el contenido de las encuestas podrían interponer una denuncia en contra de Fox y el PAN ante el IFE y la Fiscalía Electoral de la Procuraduría General de la República.

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También investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, John Ackerman considera que el hecho de que desde la Fox haya ordenado encuestas de preferencia electoral no viola ninguna ley, pero utilizar los resultados para apoyar al candidato de su partido representaría una acción ilegal que tendría que ser sancionada.

El especialista en temas electorales considera que “las encuestas son otra señal de la intervención que tuvo el Poder Ejecutivo en las campañas electorales del 2006”.
John Ackerman, experto en los temas reforma del Estado, Políticas Públicas,

Transparencia, Rendición de Cuentas, Organismos Autónomos y Participación Ciudadana, manifiesta que con las encuestas que da a conocer emeequis se tienen pruebas de que Fox no sólo intervino con unas simples declaraciones, sino que apoyó al PAN y su candidato presidencial con recursos públicos.

Y manifiesta su asombro por las preguntas que realizó la Presidencia durante las elecciones: ¿Qué tendría que hacer Felipe Calderón para que usted votará por él?

“Esa pregunta me llama la atención porque hay un sesgo partidario. La pregunta implica que se pudiera estar cometiendo una ilegalidad, hay que seguirle la pista a dónde fueron a parar los resultados de esas encuestas, ¿a cuáles manos llegó? Seguramente los resultados se compartieron. Es un foco rojo”.

El investigador, quien recientemente publicó el libro titulado “Organismos Autónomos y Democracia: El caso de México” considera que el contexto de la pregunta origina de oficio una causal para investigar la intromisión indebida del Poder Ejecutivo dentro de las campañas. “La pregunta podría entenderse como un financiamiento ilegal de las campañas”.

Aunque reconoce que el Código Penal Federal y en legislación electoral tienen vacíos que evitarían que los funcionarios reciban un castigo de manera directa por desviar recursos públicos para apoyar campañas electorales.

John Ackerman dice que en caso de comprobarse que las encuestas llegaron a manos del equipo de campaña de Calderón, tendrían que contabilizarse como gastos de campaña del PAN. Y por consecuencia aplicar una falta administrativa al partido. “Con esto se demuestra que el Estado tiene muchas formas de afianzar su poder y utilizar los recursos para fines que no son públicos”.