DEL EDITORIAL DE DIARIO LIBERTAD
Sin soslayar los mares de llanto que han derramado en nuestro México los muy honorables medios de comunicación (los que Usted conoce y conoce muy bien) por lo sucedido a “Radio Caracas TV”.
Cuando la mayoría de ellos (al igual que los que hay en América Latina) están en manos de auténticos hampones. Razón por la cual aquí se han incondicionalmente solidarizado con la mencionada Empresa Venezolana.
Sin querer entender que la democracia es la voluntad del pueblo y que los venezolanos, chueco o derecho, pero por abrumadora mayoría apoyan la decisión tomada por su Presidente. Amén de que los asuntos internos de la hermana República, son de su absoluta exclusividad.
Cabe comentar que las cosas en nuestro México comienzan a tomar tintes fundamentalistas y anti-democráticos (dictatoriales también cabría) toda vez que Eduardo Medina Mora, el Procurador General de la República.
Siguiendo las instrucciones del protector de pederastas al que llaman Papa (Benedictus XVI) a quien hace unos días fue a visitar por indicaciones del Presidente Calderón (hoy probadamente espurio).
Junto con el doctor José Luis Soberanes, “Caballero de Colón” y Presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (sin crédito personal cual ninguno) pretenden echar abajo la despenalización del aborto recién aprobada en el DF, aduciendo su anticonstitucionalidad.
Cuando la mayoría de los capitalinos (y esa es la auténtica democracia) está de acuerdo con la citada Ley.
Lo que aunado al arrogante “Ni un paso atrás” que el Primer Mandatario (¿?) de la Nación espetó cuando el Congreso le solicitó que los militares se regresaran a sus cuarteles, es prueba fehaciente de que nuestra decantada democracia es bastante similar a la que viven en el Estado Vaticano (o en los EEUU también cabría).
Lo nos espera a los mexicanos será todavía mucho peor, hasta en tanto no nos decidamos a tomar las riendas de nuestro propio destino y obligar a quienes nos gobiernan (sojuzgan sería más adecuado) a obedecer los mandatos del Pueblo.
Y lo podemos hacer el próximo 4 de Julio, si quienes estamos inconformes con la dictadura llevamos a cabo un boicot a la Coca-Cola (símbolo del imperialismo).
Pues por muchos intereses que hayan al respecto, ningún interés es más importante para los globalizadores que el dinero. Mismo que se perdería en cantidades verdaderamente fabulosas si los inconformes se abstienen de consumir el burbujeante refresco, hasta en tanto no se despenalice el uso de las drogas.
Lo que terminaría automáticamente con las matanzas que a diario vemos; y hasta que se acepte el que las mujeres (y solo las mujeres) sean quienes decidan la cantidad de hijos que quieren tener.
Lo que por cierto, está claramente estipulado en la Constitución Mexicana en su artículo 4° que textualmente dice:
“Toda persona tiene derecho a decidir de manera libre, responsable e informada sobre el número y espaciamiento de sus hijos”.
Aunque por lo que se ve, parece que el Procurador Eduardo Medina Mora y el llamado Ombusman, José Luis Soberanes, lo ignoran al considerar anticonstitucional tal derecho.