EL DILEMA DEL PELELE URSURPADOR
PERDIENDO LEGITIMIDAD
Hace algunas semanas la revista Forbes, publico su lista de los 900 millonarios más grandes del mundo, en ella aparecen ilustres mexicanos que a pesar del poco crecimiento económico registrado en el país, del elevado desempleo, de la escalada de precios, de la crisis del campo, de los problemas de competitividad de la economía mexicana y de otros temas como el fobaproa y el rescate carretero, lograron incrementar de manera conjunta su riqueza en aproximadamente 23 mil 500 millones de dólares, es decir casi 265 mil 550 millones de pesos, en sòlo un año.
De esta manera, mientras que en el año 2006 la riqueza conjunta de estos 9 ilustres mexicanos ascendía a 48.9 mil millones de dólares, para el 2007 ascendió a 72.4 mil millones de dólares.
Hay que mencionar que la mayoría de ellos, son dueños de importantes grupos controladores de empresas, “holdings” que abarcan diversos campos de múltiples actividades económicas: telecomunicaciones y telefonía, construcción, industria, banca, etc, etc.
Una de las primeras reflexiones que nos debemos de hacer, es como es posible que estos grupos que operan en diversos sectores hayan podido registrar tan importantes incrementos en sus utilidades que hayan permitido a sus dueños incrementar su riqueza conjunta en 48%, mientras que la economía mexicana apenas y creció en 4%.
Más aún, de acuerdo a las cifras más recientes publicadas por la SHCP, durante el 2006, la recaudación total por concepto del Impuesto Sobre la Renta (ISR), fue de 439 mil 264 millones de pesos.
De ese total, 171 mil 437.1 millones correspondieron a la recaudación proveniente de las “personas morales”, empresas o grupos de empresas.
Bajo el razonamiento anterior, sería lógico pensar que de los 23 mil 500 millones de dólares que corresponden al incremento de las utilidades o fortuna de estos mexicanos en sólo un año, el 28% lo debieron de haber pagado de impuesto sobre la renta (ISR), y por lo tanto esto se debió de haber visto reflejado en la recaudación empresarial del ISR.
En otras palabras, el incremento de 23 mil 500 millones de dólares en la riqueza de estos individuos, (265 mil 550 millones de pesos) debiera de haber significado una recaudación para el fisco mexicano de aproximadamente 74 mil 354 millones de pesos.
Es decir que si este hubiese sido el caso, estos 9 mexicanos ilustres hubieran aportado ellos solos durante el 2006 aproximadamente el 43.3% de la recaudación del ISR proveniente de las “personas morales” dado el éxito de sus empresas,
Así el resto de contribuyentes “personas morales” que de acuerdo a la cifras de Agustín Carstens se estiman en 421 mil 888 empresas, tuvieron que haber aportado el 56.7% restante, es decir casi 95 mil millones de pesos entre todos.
Si este fuera el caso, estas 9 personas estarían manteniendo a las finanzas de este país y deberían ser considerados, después de PEMEX, como héroes nacionales.
Pero también habría que considerar entonces, que la dependencia que comanda Agustin Carstens es altamente ineficiente para cobrarle al resto de las empresas que existen, puesto que de acuerdo con sus cifras, de las más de 421 mil empresas restantes, apenas aportaron 95 mil millones de pesos, entre todas
Luego entonces, resulta absurdo que la recaudación obtenida de 421 mil 888 empresas, resultara para 2006, prácticamente equivalente a lo que aportaron (si es que lo hicieron) las empresas de estos 9 individuos.
Otra explicación, quizá la más creíble, es que estos 9 mexicanos, dueños de estos grupos de empresas, recurrieron a ciertos mecanismos que existen en la ley y que sólo pueden ser utilizados por los grandes grupos económicos para no pagar impuestos y ello explique entonces la verdadera razón de que su riqueza haya crecido en 48% mientras que la economía sólo lo hizo en 4%.
Esta situación que hasta hace poco parecía una invención de los llamados “radicales comunistas” fue confirmada por el Auditor de la Naciòn, quièn recientemente revelò que se ha detectado que 50 grandes contribuyentes, cuyos pagos individuales de ISR en 2005, deducidas las devoluciones, fueron menores a 74 pesos, mientras que otros 50 de éstos sólo pagaron hasta 67 pesos por concepto de IVA.
Esto significa, que estos grandes contribuyentes pagaron en un año, menos impuestos que lo que pagò una persona que gana mensualmente entre 6 y 7 mil pesos, en pocas palabras Wall Mart, Bimbo, el Grupo Alfa, CEMEX o Bachoco pagaron menos impuestos que lo que pagaron de impuestos muchos de sus empleados.
Y como siempre, los bancos rescatados por el FOBAPROA con recursos de los mexicanos, no se podian quedar atrás y se sabe que a tres bancos Banamex, BBVA, y HSBC tuvieron tratamientos especiales que les permitieron ahorrarse impuestos por un monto de 28 mil 663 millones de pesos, lo que equivale a lo que costo de la pensiòn alimenticia para todos los adultos mayores del paìs.
Màs aùn, se sabe que, con lo que se dejó de recaudar por estos privilegios que existen para unos cuantos, se pudo haber pagado casi el 90 por ciento del las pensiones a los jubilados en 2005, o casi 60 por ciento de la inversión pública.
En otras palabras, tal pareciera que en realidad no era necesario modificar la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) o tratar de resolver el problema financiero de Petróleos Mexicanos (Pemex) mediante fórmulas que apuntan hacia la privatización, sino más bien, el remedio está en el hecho simple y llano de que quienes deben pagar impuestos los paguen.
Los hallazgos también muestran que el sistema fiscal, así como está, se ha convertido en un elemento que impide la libre competencia, puesto que, mientras que las pequeñas y medianas empresas, así como los asalariados, cumplen en tiempo y forma con sus obligaciones fiscales, algunas grandes empresas no lo hacen y utilizan, en colusión con algunas autoridades, subterfugios legaloides para no pagar sus impuestos.
Esta es la verdadera razón de que el Estado mexicano no cuente con recursos para hacer frente a las obligaciones que le marca la Constitución.
Lo que no ingresa anualmente a las arcas nacionales representan también, cuando menos 10 años del gasto anual de la Universidad Nacional Autónoma de México; con esos recursos tambièn, se hubiera podido abatir el desabasto de medicinas en el Instituto Mexicano del Seguro Social y en el ISSSTE, o dar mantenimiento a toda la infraestructura de oleoductos de Pemex.
Sin embargo, lo que ha quedado de manifiesto es que la injerencia de estos grupos de poder ha sido tal, que mantienen ya prácticamente secuestrado al Estado mexicano.
Estos grupos, que tienen intereses en sectores estratégicos de la actividad productiva, no se han conformado con ejercer un poder monopólico u oligopolio en las actividades que llevan a cabo, sino también se niegan a pagar impuestos.
Asì en materia fiscal, Felipe Calderón se enfrenta a un gran dilema: cobrarle impuestos a aquellos grupos que lo ayudaron a legitimar el fraude del 2 de julio, o bien continuar perdiendo legitimidad al continuar siendo rehén de estos grupos que se niegan a pagar impuestos y entonces aplicar el IVA en Alimentos y Medicinas o bien cambiar el régimen del IVA de tasa cero a exentos y bajar la tasa del impuesto sobre la renta a las empresas.
EL CHAMUCO