Zacatecas, cochinero y desvergüenza de Amalia

Intinerario Político: Ricardo Alemán

En Zacatecas no solo se vive el regreso del PRI al poder estatal; no sólo se experimenta la caída escandalosa de un gobierno dizque de izquierda, y no sólo se ha producido una saludable alternancia en el poder.

No, en Zacatecas queda claro a los ojos de todos, por si alguien tenía dudas, el fracaso cultural de la llamada izquierda mexicana. Por eso vale la pregunta: ¿Por qué hemos insistido en caracterizar como fracaso cultural de la izquierda los retrocesos ideológicos, políticos y culturales experimentados por esa tendencia política? La razón parece elemental; porque los gobiernos de izquierda han sido un engaño.

Es decir, que todos o casi todos los gobiernos surgidos de la llamada izquierda mexicana, han terminado en groseras colonias de lo más vulgar y cuestionable del viejo PRI, a pesar de que hace muchas décadas la izquierda y la derecha nacieron en México como alternativa al PRI.

Los ciudadanos y electores cuyas edades fluctúan en el rango de los 40 años, recordarán con facilidad que apenas en las elecciones presidenciales de 1988, el PAN y el PRD, o el antecedente de éste, conocido como Frente Democrático Nacional, eran verdaderas alternativas al PRI; fuerzas políticas que alzaban los estandartes de la democracia, el fin del autoritarismo, la lucha contra la corrupción y los postulados de gobiernos honestos y eficaces.

¿Qué ha pasado apenas en dos décadas, luego de esas memorables batallas en donde la izquierda y la derecha se batían por igual con todos los sectores que agrupaba el viejo PRI?. Pues la resultante son gobiernos como el de Zacatecas, y gobernantes como Amalia García. ¿Y cómo son esos gobiernos que presumen su identidad con la izquierda, pero que son un fracaso de esa izquierda?

Pues son gobiernos corruptos, nada democráticos, ladrones, a los que sólo preocupa medrar con el dinero público, y en manos de gobernantes mentirosos, mediocres, que creen que los ciudadanos y los electores son o somos retrasados mentales.

En este espacio denunciamos a lo largo de los seis años del Gobierno de Amalia García, toda clase de pillerías, tranzas, maniobras políticas y corruptelas, que hicieron ver como blancas palomas a los gobiernos priistas anteriores a la llegada del PRD al poder en Zacatecas.

En pocas palabras, que el Gobierno dizque izquierdista de Amalia García resultó peor de corrupto, ladrón, autoritario, despótico, ineficaz y despilfarrador, que cualquiera de los peores gobiernos del PRI. ¿Y en todos los casos, cuál fue la respuesta a la crítica, a la exhibición de evidencias y a la comprobación del cochinero en que se convirtió el Gobierno de Amalia García?

En efecto, la respuesta fue la mentira, el engaño, la demagogia, la farsa y la desvergüenza. Ahora resulta que sin pudor alguno, la señora Amalia García nos viene con el cuento de que en su contra se ha desatado una campaña de desprestigio, cuando todos saben que el suyo fue un Gobierno despilfarrador, deshonesto, de servidores públicos ladrones y, por si hiciera falta, que pretenden engañar a la opinión pública.

Una perla reciente. El nuevo Gobierno estatal denuncio que el DIF de Zacatecas compro 3 mil 500 botellas de mezcal, seguramente para estimular el desarrollo integral de la familia. Bueno, pues la señora Amalia García negó esa denuncia y sin pudor alguno dijo que la compra la había hecho la Secretaría de Gobierno. Un diario local de Zacatecas debió exhibir las facturas, y las mentiras de la Gobernadora.

Pero ya en el extremo de la desvergüenza, Amalia García salió con el cuento de que gracias a su buen Gobierno, buscará ser Jefa de Gobierno del Distrito Federal. ¿Qué tal con la desvergüenza?. Pero esa es la izquierda.