Pemex y el efecto mariposa tropical
Diario Libertad / Marcela Gómez Zalce
• Felipe y la misma piedra
• Divide y...
El instinto, mi estimado, demanda abandonar toda pretensión que no se pueda realizar. Como la ardiente bolita que sube y sube, se ha desatado un simpático efecto mariposa alrededor de la mentada reforma energética donde, parajodas de la vida, el gobierno de Felipe Calderón no trae el control del frankenstein.
El procedimiento hasta ahora desplegado por el achispado Gymboree federal ha resultado un fracaso elevando aún más un halo de sospechosismo al jugar al Tío Lolo en la entrega de su iniciativa de reforma para ser discutida, abiertamente, con los otros partidos políticos.
El seductor documento de Los Pinos es epicentro político-económico de discordia doméstica y como suele suceder en uno de estos reventones donde se espera el reparto del botín (para evitar motín) con sonrisas de ansiedad, my friend, los protagonistas internacionales ya comenzaron a treparse a la lámpara ante las señales percibidas que se confrontan con el panorama color de rosa esgrimido por funcionarios de este régimen.
Sobre todo cuando ejemplos de improvisación y espontaneidad federal han sido botones absolutos de risa histérica. Ahí se tiene registrado no sólo el argumento frívolo barnizado con tacto de paquidermo de Agustín Carstens con su célebre “catarrito” mexicano ante el tsunami recesivo estadunidense sino que en el colmo de exhibirse regalando una foto internacional de pena ajena, al secretario de Hacienda de México y al secretario particular del inquilino de Los Pinos los echaron (with a shove in the ass) de una cafetería Starbuck’s donde pretendían dar los highlights de la reciente gira de su jefe.
Los echaron, mi estimado, a la calle donde la temperatura era de varios grados bajo cero. Dos de los funcionarios de más alto nivel del gobierno de México. La trivialidad ha sido sello (encerado con grados etílicos, of course) incuestionable de la presente administración que cada vez pierde más márgenes en su credibilidad.
No es un secreto que la cúpula empresarial está molesta, agraviada y fastidiada por el sugestivo proceder en estos 14 meses de quien consideraban un empleado, perdón, aliado, instalado estratégicamente en el poder. Al asunto del IETU, donde el caudal de amparos, mensajes y tubazos es caso ya de impaciencia por el peligroso cruce de señales entre la IP y Los Pinos, se suman las cejas y las miradas de preocupación (que se están transformando en horror) internacional porque Felipe Calderón se está tropezando con la misma piedra.
Y esa piedra, amable lector, es haberle sobrevendido al mundo financiero una reforma idónea que, entre otras atracciones fiscales, se cacareó un CETU que tocaba el techo de 19 por ciento y cuyo triste final fue un IETU de chisguete que hoy es otro epicentro de discordia... esperando el pay back time.
Y ese mismo escenario se está consolidando en los análisis de poderosas empresas trasnacionales interesadas en el botín energético donde además, el PRI se vendió como el factor clave para sacar al buey de la barranca legislativa. Al grado de que algunas compañías invitaron a ilustres priistas para viajar a Europa y comenzar el simpático trabajo del cabildeo ante las maravillosas deferencias (y preferencias) del Gymboree y Felipe por los consorcios españoles.
Todo iba viento en popa hasta que, como de costumbre, emergió el simpático tabasqueño con la bandera en defensa de Pemex, desarrollando un movimiento que ya prendió los focos de alarma.
Sobre todo cuando Los Pinos, el PAN y el PRI se encargaron de susurrarles que no problemo man, López Obrador estaba liquidado, desgastado, depreciado, destruido y terminado. La reforma será un día de campo (pero minado)
Y pissing in everybody´s parade, Andrés Manuel ya prendió un movimiento donde la bolita energética de Felipe está volando (¿en pedazos?), donde nadie parece tener control del aterrizaje (que se antoja forzoso) y peor aún, donde las trasnacionales han recibido señales de las lacritas tricolores que quizá no se logren los consensos internos —contaminados además por los planes políticos del inigualable Manlio Fabio Beltrones— desarrollando un ánimo internacional que dista ser de jubilosa confianza y sí de inmensa incertidumbre.
Y eso que este reventón calienta, oficialmente my friend, motores el próximo domingo 24...
Por la Mirilla
Fantástico el nombramiento de Norberto Tapia al frente de RTC.
Espléndido el pronosticado jaloneo con la subsecretaria Irma Pía González Luna.
Fenomenal el olfato político de Juan Camilo y Max.
Divide... y vencerás.
• Felipe y la misma piedra
• Divide y...
El instinto, mi estimado, demanda abandonar toda pretensión que no se pueda realizar. Como la ardiente bolita que sube y sube, se ha desatado un simpático efecto mariposa alrededor de la mentada reforma energética donde, parajodas de la vida, el gobierno de Felipe Calderón no trae el control del frankenstein.
El procedimiento hasta ahora desplegado por el achispado Gymboree federal ha resultado un fracaso elevando aún más un halo de sospechosismo al jugar al Tío Lolo en la entrega de su iniciativa de reforma para ser discutida, abiertamente, con los otros partidos políticos.
El seductor documento de Los Pinos es epicentro político-económico de discordia doméstica y como suele suceder en uno de estos reventones donde se espera el reparto del botín (para evitar motín) con sonrisas de ansiedad, my friend, los protagonistas internacionales ya comenzaron a treparse a la lámpara ante las señales percibidas que se confrontan con el panorama color de rosa esgrimido por funcionarios de este régimen.
Sobre todo cuando ejemplos de improvisación y espontaneidad federal han sido botones absolutos de risa histérica. Ahí se tiene registrado no sólo el argumento frívolo barnizado con tacto de paquidermo de Agustín Carstens con su célebre “catarrito” mexicano ante el tsunami recesivo estadunidense sino que en el colmo de exhibirse regalando una foto internacional de pena ajena, al secretario de Hacienda de México y al secretario particular del inquilino de Los Pinos los echaron (with a shove in the ass) de una cafetería Starbuck’s donde pretendían dar los highlights de la reciente gira de su jefe.
Los echaron, mi estimado, a la calle donde la temperatura era de varios grados bajo cero. Dos de los funcionarios de más alto nivel del gobierno de México. La trivialidad ha sido sello (encerado con grados etílicos, of course) incuestionable de la presente administración que cada vez pierde más márgenes en su credibilidad.
No es un secreto que la cúpula empresarial está molesta, agraviada y fastidiada por el sugestivo proceder en estos 14 meses de quien consideraban un empleado, perdón, aliado, instalado estratégicamente en el poder. Al asunto del IETU, donde el caudal de amparos, mensajes y tubazos es caso ya de impaciencia por el peligroso cruce de señales entre la IP y Los Pinos, se suman las cejas y las miradas de preocupación (que se están transformando en horror) internacional porque Felipe Calderón se está tropezando con la misma piedra.
Y esa piedra, amable lector, es haberle sobrevendido al mundo financiero una reforma idónea que, entre otras atracciones fiscales, se cacareó un CETU que tocaba el techo de 19 por ciento y cuyo triste final fue un IETU de chisguete que hoy es otro epicentro de discordia... esperando el pay back time.
Y ese mismo escenario se está consolidando en los análisis de poderosas empresas trasnacionales interesadas en el botín energético donde además, el PRI se vendió como el factor clave para sacar al buey de la barranca legislativa. Al grado de que algunas compañías invitaron a ilustres priistas para viajar a Europa y comenzar el simpático trabajo del cabildeo ante las maravillosas deferencias (y preferencias) del Gymboree y Felipe por los consorcios españoles.
Todo iba viento en popa hasta que, como de costumbre, emergió el simpático tabasqueño con la bandera en defensa de Pemex, desarrollando un movimiento que ya prendió los focos de alarma.
Sobre todo cuando Los Pinos, el PAN y el PRI se encargaron de susurrarles que no problemo man, López Obrador estaba liquidado, desgastado, depreciado, destruido y terminado. La reforma será un día de campo (pero minado)
Y pissing in everybody´s parade, Andrés Manuel ya prendió un movimiento donde la bolita energética de Felipe está volando (¿en pedazos?), donde nadie parece tener control del aterrizaje (que se antoja forzoso) y peor aún, donde las trasnacionales han recibido señales de las lacritas tricolores que quizá no se logren los consensos internos —contaminados además por los planes políticos del inigualable Manlio Fabio Beltrones— desarrollando un ánimo internacional que dista ser de jubilosa confianza y sí de inmensa incertidumbre.
Y eso que este reventón calienta, oficialmente my friend, motores el próximo domingo 24...
Por la Mirilla
Fantástico el nombramiento de Norberto Tapia al frente de RTC.
Espléndido el pronosticado jaloneo con la subsecretaria Irma Pía González Luna.
Fenomenal el olfato político de Juan Camilo y Max.
Divide... y vencerás.