Bloggeando desde Zacatecas

El Sr. López| El Fraude Electoral|La Verdad Sea Dicha|Las Protestas|Foxilandia|El Fraude Según Fox
BLOG En Constante Actualización, F5 Para Recargar

México Necesita Que Lo Gobierne Las PUTAS, Porque Sus Hijos Le Fallaron

M O R E N A (MOvimiento de REgeneración NAcional)

Blogeando Desde Zacatecas En Pie De Lucha Rumbo Al 2012, AMLO PRESIDENTE

lunes, 29 de octubre de 2007

INDICADOR POLITICO

CARLOS RAMIREZ
Publicado el: 2007-10-29


* Gobierno 1 de PAN, peor que PRI
* Marta, poder; la Bejarano de Fox

En el fondo, muy en el fondo, el problema de Vicente Fox y Marta Sahagún no es de los medios ni de los priístas, sino del PAN y del presidente Felipe Calderón. El asunto se resume así: ¿será juzgado el primer gobierno presidencial del PAN con la misma impunidad como los trece del PRI?

En sólo seis años la pareja presidencial panista --Marta es consejera del partido-- que encabezó el primer gobierno presidencial del PAN ha acumulado denuncias de corrupción, represión y empobrecimiento social como los que sumó el PRI a lo largo de setenta y un años en el poder. En este contexto, la severidad de los juicios contra la pareja presidencial debería ser de los panistas, de los que votaron por Fox y de los que buscaron una alianza política a favor de la transición mexicana a la democracia. Por eso los Fox, la dinámica pareja presidencial que reinó en el país durante seis años, han subido la mira para promoverse en víctimas propiciatorias de los priístas a los que les quitó la presidencia en el 2000.

Pero no debe ser así. Los Fox deben ser llamados al banquillo de los acusados por panistas y simpatizantes. Si no hay rendición de cuentas, entonces la opinión pública va a juzgar a los Fox como productos del panismo priízado. Es decir, quedará la impresión de que la historia ética del PAN fue tirada a la basura porque el primer gobierno presidencial panista salió exactamente igual de corrupto que los priístas.

De ahí también que el caso de los Fox deba ser juzgado en una óptica política y de gobierno. Lo de la Hummer o el jeep rojo es nada en comparación con la evaluación que se debe hacer no de los Fox sino del primer gobierno presidencial panista. Y el gobierno de Calderón será evaluado por sus resultados sexenales, pero también por la forma en que encaró el asunto de los Fox: con una cobija de impunidad hacia las corruptelas de Fox, Marta y los hermanos Bibriesca o con la decisión ética panista de que no cubrirá la corrupción de panistas en el poder. Calderón deberá de definir si será un gobierno igual a los priístas o no permitirá la corrupción de sus compañeros de sector y de partido.

Por eso el PAN en el poder va a ser evaluado no por lo que haga Calderón de aquí en adelante sino de la forma en que el PAN en el gobierno presidencial enfrente el expediente de corrupción de los Fox. Y de la manera en que el PAN calderonista juzgue a Fox más allá de los temas anecdóticos de los autos, el rancho o los relojes, sino la forma en que Fox dilapidó el bono político y democrático del PAN, gobernó de la misma manera que los priístas y dejó una herencia similar a la del PRI.

Es decir, el PAN en el poder debe aclarar, a través de los Fox, si hay diferencia con los años del PRI en el poder o si el poder priizó al PAN. El asunto de los Fox tampoco es de género, sobre todo porque la señora Sahagún ha comenzado a poner en práctica sus dotes de actriz para declararse perseguida por el machismo. Aunque se trata de la misma Marta Sahagún que explotó su condición de mujer para llevar a Vicente Fox a la orilla de su candidatura presidencial en 2006. Y de la misma que recicló la palabra empoderamiento, que es una derivación de la palabra empoderar y su significado oficial de arrebatar el poder.

Marta Sahagún debe ser evaluada y juzgada no como mujer sino como esposa del principal funcionario del primer sexenio presidencial panista después de setenta y un años de dominio priísta. La corrupción ocurrió en la residencia presidencial oficial, no en algún oscuro café. Y lo hizo a partir de tráfico de influencias condenado por las leyes. Pero sobre todo, censurado por la ética panista de quienes fundaron el PAN para llegar al poder y ser diferentes a los priístas. Sahagún fue la René Bejarano de Fox.

El saldo debería apenar al PAN y a los panistas: Fox y Sahagún, los dos distinguidos miembros del PAN, llegaron al poder para beneficiarse de él como lo hicieron, vía la corrupción, el abuso y la falta de ética, los priístas.

En consecuencia, la sociedad, los medios y los priístas debieran impedir que Fox los lleve a su terreno de juego. No se juzga al senador priísta Manlio Fabio Beltrones, cuya acusación en su contra fue una mancha en la historia del The New York Times porque lo obligó a disculparse por una nota inventada por el corresponsal Sam Dillon. Por cierto, mañosamente, como si fuera un periodista del viejo modelo de periodismo mexicano, Dillon tuvo que esconder esa nota del Comité Pulitzer para que no empañara su premio de periodismo con informaciones inventadas. Ahí se descubrió que la nota contra Beltrones había sido inducida por el gobierno de Ernesto Zedillo y comprada por el NYT.

La sociedad civil, los medios y el medio político está juzgando en los Fox al primer gobierno presidencial panista. Y verá también críticamente si el segundo gobierno panista, cuya función primordial era mostrarle a la sociedad que no cubriría el cochinero de su antecesor, aplicará las mismas técnicas políticas de encubrimiento. ¿No fueron los panistas los más críticos con los priístas que tapaban a sus antecesores?.

De ahí que lo que está en juego es algo más serio: ¿será el PAN en el poder igual de corrupto, tapadera y promotor de la impunidad que el PRI? Los Fox dirán si sí o si no.