YUNQUISTAS, QUIEN NADA DEBE NADA TEMEP, PERO USTEDES YO CREO QUE DEBEN TODO
Por Esto
jueves, 24 de mayo de 2007
José Guy Puerto Espinosa, Jorge Isaac Sesín y demás “Amigos de Patricio”, que operan desde la Sedeinco, tienen numerosas cuentas pendientes con la sociedad que no desea borrón y cuenta nueva, sino que exige un castigo ejemplar para todos ellos por su paupérrimo y corrupto desempeño
A dos meses de su partida, José Guy Puerto Espinosa, titular de la Secretaría de Desarrollo Industrial y Comercial (Sedeinco), así como su Subsecretario de Desarrollo, Jorge Isaac Sesín y demás miembros del selecto grupo de “Amigos de Patricio” que operan en esa dependencia, están más que nerviosos porque temen que la próxima administración les finque responsabilidades por su paupérrimo y corrupto desempeño.
Esa dependencia tendrá que explicar, entre otras muchas cosas, sus oscuras relaciones con un grupo español, al que planeaban entregar en bandeja de plata la infraestructrura de una Plataforma Logística de Exportación, construida con recurso públicos; también deberán dar cuenta del estudio respectivo elaborado por Prointec y la Universidad del Mayab sobre el particular, el cual mantienen oculto, como si se tratara de un secreto de Estado y no de un instrumento para promover la inversión de capitales.
Por su parte, Jorge Isaac Sesín todavía tiene pendiente de aclarar el desbarajuste del Consejo Pymexporta, así como los negocios que él mismo ha hecho al amparo del poder, pero al margen de la ley.
Sedeinco, de ser una de las dependencias clave para impulsar el desarrollo de Yucatán pasó a convertirse en el mayor fraude de la administración de Patricio Patrón Laviada.
Alejandro Mier y Terán Fortuny, primero, y José Guy Puerto Espinosa, su actual titular, prefirieron hacer negocios con un puñado de “Amigos de Patricio”, entre quienes se distribuyeron cantidades millonarias, casi siempre a fondo perdido, es decir, que no tenían la obligación de devolver.
Sedeinco jamás contó con un plan de amplio aliento para el futuro de la entidad.
En efecto, en vez de promover el desarrollo de las zonas del Estado que se encuentran en el mayor de los rezagos,
El mayor pecado de José Guy Puerto Espinosa es que jamás intentó o pudo desligarse del cordón umbilical que lo une a Alvaro Juanes Cámara, el operador económico de Patrón Laviada, con quien comparte utilidades.
Vale la pena recordar las denuncias que pesan contra Guy Puerto, pues revelan la grave descomposición de esa dependencia que se manejó siempre como un feudo y no como una oficina de promoción de negocios para crear las fuentes de empleo que tanto necesita Yucatán.
El 2 de julio del 2005, Raúl Martínez, alcalde por quinta ocasión de la pujante comunidad de Hialeah, Florida, alertó sobre el fraude que hacían contra el pueblo de México y de Yucatán personas identificadas con Patricio Patrón Laviada, quienes sostenían reuniones de carácter oficial y/o tratos políticos o de negocios con Nilo Juri Moreno, un delincuente confeso que enfrenta cargos criminales tanto en los EE. UU. como en México.
El munícipe se refería a la inexplicable reunión que sostuvieron con Nilo Juri Moreno en Miami, Florida, del 7 al 9 de octubre del 2004, µlvaro Juanes Cámara y Enrique José Mendoza Cámara, quienes sin tener un cargo en la Sedeinco, viajaron con todos los gastos pagados por el titular de esa dependencia José Guy Puerto Espinosa.
Raúl Martínez, en entrevista con POR ESTO!, aseveró que era lamentable que funcionarios del Gobierno del Estado de Yucatán mantuvieran contacto oficial con Nilo Juri Moreno, “un sujeto que ha defraudado tanto en esta nación como en México, pues su proceder ha sido siempre al margen de la ética. Nilo Juri Moreno es uno de los más conocidos políticos de Hialeah, pero por sus líos con la justicia de ese país”.
Al respecto, Enrique Mendoza Cámara, “asesor jurídico de la Sedeinco” y uno de los directamente acusados, aceptó en entrevista telefónica con POR ESTO!, que tanto él como µlvaro Juanes Cámara viajaron a Miami, Florida, con todos los gastos pagados para entrevistarse con el delincuente Nilo Juri Moreno. Sin embargo, en todo momento evadió responder el papel que desempeñó en esos viajes Juanes Cámara, operador económico de Patricio Patrón Laviada.
El individuo cayó en contradicciones: Primero dijo que había viajado a esa ciudad de la Florida para “preparar un viaje de promoción del Secretario José Guy Puerto Espinosa”, pero luego corrigió y dijo que lo había hecho “para promocionar turística e industrialmente a Yucatán”.
La verdad es que, como luego asentaron ambos en la comprobación de los gastos que entregaron a la Sedeinco, ambos habían ido a Miami con todos los gastos pagados por el erario para entrevistarse con Nilo Juri Moreno, “asesor político del partido Republicano en la Florida, según asentaron ambos en la justificación, quien enfrenta cargos criminales tanto en EE.UU., como en nuestro país”.
Mendoza Cámara nunca supo explicar cómo es que en su primer viaje y en su calidad de “asesor jurídico”, según él, usurpó funciones del entonces Subsecretario de Promoción, Bernardo Cisneros, y en los posteriores sustituyó al actual Subsecretario, Jorge Isaac Sesín, así como responsabilidades de la Secretaría de Turismo, Carolinas Cárdenas Sosa.
Ante el escándalo, los diputados de la Comisión de Industria “invitaron” el viernes 8 de julio a las 11 horas, a José Guy Puerto Espinosa, a fin de que explicara por qué la Sedeinco había costeado el viaje a Miami de dos sujetos que no son empleados de la dependencia.
Por su parte, Eduardo Ramos García, presidente de la Cámara de la Industria del Vestido en Yucatán (Canainves), exigió infructuosamente una profunda investigación de por qué José Guy Puerto Espinosa, titular de la Sedeinco, gastaba los dineros públicos en situaciones que no tienen nada que ver con el desarrollo comercial e industrial del Estado.
Guy Puerto Espinosa no sólo desdeñó la representatividad de los diputados de la Comisión de Industria y Comercio, Artesanías y Turismo, que lo citaron a comparecer, sino también la demanda de todos los representantes de la sociedad que se pronunciaron a favor de que compareciera ante el Poder Legislativo o bien diera la cara públicamente para enfrentar las consecuencias de sus actos que, como se ha documentado de manera contundente, fueron claramente al margen de la ley.
Con un documento enviado a los diputados, Puerto Espinosa señaló que “recibí una invitación informal para asistir a una plática sobre asuntos relacionados con la Secretaría” y puso de pretexto para no ir que estaba dando prioridad a todo lo relativo al cuarto informe de gobierno, y los dejó con un palmo de narices.
Guy Puerto Espinosa no salía de esa bronca, cuando otro escándalo le explotó en la cara: el macrofraude del sexenio que estaba en proceso de concretar µlvaro Juanes Cámara, operador económico de Patricio Patrón Laviada, bajo la pantalla de una “Plataforma Logística de Exportación”, que en su primera etapa contemplaba una inversión de 20 millones de dólares; la plataforma, se aseguró en ese momento, podría no ser más que un negocio de saliva o de portafolio para que “Los Amigos de Patricio”, que son unos cuantos, se apropiaran impunemente de abultados fondos provenientes del erario, en grave perjuicio de la economía del Estado y los yucatecos.
La investigación de POR ESTO! llegó hasta Barcelona, España, donde se descubrieron las oficinas en las que operaba el “consultor” español Guillermo Rubio Sanz, al servicio de la Sedeinco, y quien de buenas a primeras se convirtió en secretario del Consejo de Administración de “Operadora Logística Balam 2004, S.L.”, que tendría a su cargo la “Plataforma Logística de Exportación de Yucatán”.
Al descubrirse que Rubio Sanz jugaba con doble camiseta, diputados, dirigentes empresariales y líderes sociales exigieron, una vez más infructuosamente, que Guy Puerto explicara el asunto; los “operadores” del megafraude se escondieron para no dar información, hasta que descubrimos operando en lo oscurito en el hotel Fiesta Americana, al norte de la ciudad, a Guy Puerto y al “inversionista” y socio español Guillermo Rubio Sanz, quien en forma desesperada intentó deslindar del escándalo a µlvaro Juanes Cámara.
A estos sucios negocios se acumularon muchos otros, como el descarado desvío de recursos federales y estatales para favorecer a empresas de “Amigos de Patricio”, y más aún, a funcionarios de la misma Sedeinco, como es el caso de Jorge Isaac Sesín, quien había armado organizaciones “fantasmas” para apoderarse de recursos a fondo perdido, con el pretexto de “capacitar” al gremio joyero de Yucatán, en el que por cierto tiene fuertes intereses económicos.
Otro hecho negativo en este sexenio radica en que la otrora pujante industria maquiladora de Yucatán se vio reducida sensiblemente sin que el gobierno hiciera algo efectivo para conservarlas en nuestro suelo. Con el pretexto de que estaban en busca de maquiladoras de “segunda generación”, de las que por cierto sólo se han establecido no más de tres, tanto Guy Puerto como Patricio Patrón lanzaron al desempleo a miles de trabajadores, con los consiguientes perjuicios para sus familias.
La dependencia se caracterizó por ser una de las más oscuras de la pésima administración de Patrón Laviada, al esconder todo tipo de información solicitada.
Para muestra un botón: el pasado 16 de enero presentó con gran pompa a los medios de comunicación y cámaras empresariales, un supuesto proyecto llamado “Plataforma Logística de Yucatán”, documento que fue solicitado mediante la Ley de Acceso por este diario, y que hasta el día de hoy con diferentes subterfugios legales y con el apoyo de Wilberth Evia Bolio, notario público en funciones, y director de la Unidad de Acceso a la Información del Poder Ejecutivo, se nos ha negado, a pesar de que dicho estudio fue pagado con recursos del erario.
Seguramente, quien ocupe la Contraloría del Estado en la siguiente administración tendrá oportunidad de indagar cómo y en qué gastaron estos sujetos los millones de pesos que les fueron asignados.