SOLO LO QUE LOS YUNQUISTAS APRUEBAN ESTA BIEN, EL RESTO ES UNA ABERRACION
lunes, 16 de abril de 2007
.- Dos asuntos, que competen a la sociedad, es decir: al pueblo, han merecido una doble medida para calificarlos (y descalificarlos). La reforma y contrarreforma a la Ley del ISSSTE, para crear nuevas modalidades de pensiones, a través del Pensionissste, y para capitalizarlo. Esto último no porque su capital-subsidios hayan beneficiado a los trabajadores, sino por el saqueo de que ha sido víctima esa institución.
II.- El otro tema es el aborto, en torno al cual, no sus críticos y adversarios, sino los enemigos fanáticos de ese derecho femenino, han desatado las más diabólicas censuras, incluso desde el púlpito de una iglesia, la Romana, Apostólica y Católica. No hay un debate entre estos y los panistas fundamentalistas; simple y llanamente son impugnaciones al calor del enojo de los sectores más irracionales.
III.- Ambos asuntos competen, democráticamente, a toda la población. Minorías y mayorías o a todas las partes en que se ha dividido el pueblo, corresponde participar como integrantes de la opinión pública, para dejar establecido su punto de vista y así coadyuvar a resolver el nudo gordiano de la pluralidad de opiniones y así encontrar la solución.
IV.- Hasta un cardenal se dejó venir de Roma, enviado por el Papa, no para exponer el doctrinal parecer del clero político, sino para enjuiciar y descalificar la propuesta para implantar el derecho de las mujeres a embarazarse o abortar, conforme a una regulación jurídica que facilite, sin sanciones draconianas, interrumpir la fecundación.
V.- Al declarar sobre las rabiosas descalificaciones clericales, el senador panista (enemigo a muerte de Calderón y cómplice de la pareja de los Foxes): Santiago Creel, güerito y blanco con ojos azul-verdosos y por cuyas características raciales se siente superior, aseveró que quienes se oponen a las reformas-contrarreformas del ISSSTE, son grupos violentos a los que, salvo para las represiones, no se debe tomar en cuenta.
VI.- En cambio, los clericales y sus seguidores que hasta uno de ellos, Serrano Limón, el dueño de "Pro-Vida", se atrevió a proferir violentísimas amenazas que huelen a muy probables atentados de homicidio, contra quienes proponen y defienden instituir el derecho para abortar con ciertas limitaciones. Esas advertencias son consideradas, por los panistas, como opiniones comedidas, cuando son violentas.
VII.- Los panistas y sus facciones religiosas tienen, pues, un doble rasero para evaluar las opiniones y las propuestas, y las amenazas y descalificaciones. A éstas, como provienen de su partido y su iglesia, todas las consideraciones. Aquéllas son tildadas de violentas. Igual pasa contra quienes se oponen a que los trabajadores sean los únicos paganos de la contrarreforma al ISSSTE, mientras quienes saquearon, sus directores priístas y ahora panistas, el perdón y el olvido.
VIII.- Santiago Creel, neopanista o sea un oportunista solamente para competir por la candidatura presidencial que ganó Calderón, desde su cargo senatorial (como aquel ministro de Nerón llamado Burro o como el caballo de Calígula investido como senador) de inmediato salió a tachar de violentos a quienes defienden el aborto y critican los cambios al ISSSTE, y a pedir a su gobierno que les aplique lo de "ni los veo ni los oigo".
IX.- El vocero panista-calderonista del güerito Creel solamente está de parte de su partido y sus facciones, incluyendo a su iglesia, mientras descalifica a quienes piensan diferente. Si los primeros tienen derecho a expresar y defender sus pareceres, también la oposición; y los que proponen el derecho para abortar gozan de libertad para exponer sus razonamientos para legislar con la mira de proteger a las mujeres.
X.- Si el gobierno federal calderonista y los diputados y senadores panistas, tienen una doble medida para enjuiciar, entonces están actuando parcialmente. Los críticos contra las adiciones a la Ley del ISSSTE y los que apoyan el derecho al aborto contra el decir panista-calderonista, no son grupos violentos porque se manifiesten públicamente. No solamente las procesiones a La Villa son válidas.