OPINIONES Y COMENTARIOS
Entendiendo que la quiebra económica conlleva una simple resta matemática que declare que lo que se debe (las pérdidas) son superiores al capital; hablando por supuesto de los negocios y de los dineros…
El que la diócesis de San Diego se haya declarado en quiebra, quiere decir, a confesión de la parte, que al Vaticano le faltan para identificarlo plenamente; cuatro letras…
Pero no las que algunos mal pensados pueden estar cavilando al recordar las palabras del Papa Pío II…
“La Corte de Roma acuerda todo al dinero; ella vende el Espíritu Santo, las ordenes sagradas y los sacramentos. Ella perdona todos los delitos a cualquiera que tenga para pagar la absolución”…
Y sin querer, también pensando obligadamente en lo que le costaría a la señora Marta (o mejor dicho, al bolsillo de todos los mexicanos) el que desde la mismísima tumba de $an Pedro…
Se hayan atrevido a nulificar su matrimonio con el veterinario Bribiesca; y todo porque a ella el galeno le daba el mismo trato que a sus pacientes (que le atizaba ¡vaya!)…
Cuando por todos en la Región era bien sabido que la Señora le ponía los cuernos con el tal Vicente (“Chente” el vengador) pues se aventaba sus viajecitos con quien después se casó siendo ya Presidente…
Y a quien según las enteradas en la materia, estaba generalmente tan deprimido todo él (razón por la que tomaba Prozac a mañana tarde y noche) que ya no le ayudaba ni el Viagra para levantarle el ánimo…
Haciendo de la curiosa relación tan dispareja entre el seudo-guanajuatense y la michoacana, el complemento ideal (que no el mejor, ni el idóneo) de sus fobias y obsesiones (de sus patologías ¡vaya!)…
Cabiendo agregar, ya que está de moda el tema tan espinoso tema de la pederastia entre los que se dicen representantes de Cri$to (razón por la cual la Arquidiócesis de San Diego se declaró en quiebra)…
Intentando de esa manera evitar los millonarios pagos que le reclaman más de un centenar de individuos, que tuvieron el valor de demandar ante las Autoridades las ilícitas perversiones de los sacerdotes y prelados…
Cabiendo comentar lo que siempre se ha dicho y es sabido; aunque pocas veces se ha pasado por el tamiz de la conciencia, que todo lo que va contra Natura, va mal; aunque aparentemente vaya bien…
El que voluntariamente alguien decida no escuchar el mandato de la conservación de la especie, solo habla de una mente que no vibra acorde a la Tierra; y de que acabará mal…
Como lo prueban la gran cantidad de homosexuales que se meten de seminaristas (de boy scauts también; y hasta en los ejércitos) para seguir haciendo de las suyas…
O los que creyendo en esas patrañas del celibato (cuyo verdadero fondo es no repartir herencias con nadie) acaban de pederastas o de depravados pervertidores de menores, a los que frecuentemente presentan como sus “sobrinos”…
Pero regresando con lo que estábamos de los negocios, los disparates y la quiebra del arzobispado de san Diego para no indemnizar a los ofendidos (una especie de auto-quiebra marca “Murat”)…
Otro Papa, Honorio III, dijo: “Quien no ofrece dinero, ni ofrece regalos, nada obtiene de Roma…
Y ya habiéndose descubierto nuestra tierra americana, el Papa Adriano VI comentó…
“Nosotros sabemos que, de largo tiempo, se comenten excesos abominables cerca de la Santa Sede. La corrupción se ha extendido de la cabeza a los miembros, del Papa a los prelados. Todos nos hemos descarrilado; no hay uno solo que haya hecho el bien. ¡Ni uno solo!”…
Ya entrados en materia; y sin salirnos del tema…
Totalmente de acuerdo con las declaraciones de la poderosa transnacional (el Vaticano) en el sentido que el supuesto descubrimiento de la tumba de Jesucri$to es un disparate sin siquiera punto de discusión (se podría agregar)…
El decir que han encontrado la tumba del Rey Arturo y sus restos, hubiera sido algo más o menos parecido; toda vez que el Rey de Camelot y el Mesías judío, son una fábula. Nunca existieron…
Como bien dijo el también Papa León X, que poco después murió de manera por demás sospechosa (no fue el primero ni el último)…
“La fábula de Jesucristo nos fructifica tanto, que sería una locura advertir a los ignorantes del engaño”…
“Te digan lo que te digan; nunca te estarán diciendo toda la verdad. Te hablen de lo que te hablen; solo te estarán hablando de dinero”. Decía la vieja conseja de los sabios…
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.