INDICE POLITICO
Por Francisco Rodríguez
Los Bribiesca, en la usura
No es novedad. Las carteras vencidas de los bancos han crecido en los últimos meses una barbaridad. La crítica escasez de dinero ha provocado que muchos jefes de familia dejen de pagar créditos al consumo, por vehículos e hipotecarios, para poder poner alimentos, cada vez más caros, en la mesa de sus dependientes.
Ante ello, los bancos no sufren ni se acongojan. Y es que aún arrastrando tales pasivos, no dejan de ganar. Gracias a la cómplice permisividad de las autoridades financieras cobran sus servicios en nuestro país como no lo hacen en ninguna otra parte del planeta.
Y como en el pasado reciente, los bancos subcontratan la cobranza de los adeudos de sus acreditados a despachos especializados que, en algunos casos, compran esas carteras en centavos por cada peso que el cuentahabiente debe a la institución bancaria.
Son negocios de riesgo, claro está. Estos bufetes jurídicos no alcanzan a cobrar todo. Pero la parte que recuperan, les deja alguna ganancia.
No sucede así, claro, cuando hay influencias políticas.
El caso de los hermanos Bribiesca Sahagún, hijos de la actual esposa del ex presidente Vicente Fox, es al parecer uno de esos.
Porque aún "huidos" o fugados en el extranjero, que para el caso es lo mismo, tanto Manuel como Jorge Alberto, estarían comprando ahora mismo carteras vencidas de los bancos con el claro objetivo de incrementar sus súbitas y malhabidas riquezas.
De acuerdo a Eliseo Cervantes Ramírez, dirigente en Nayarit de la organización de deudores El Barzón, la de los Bribiesca es una de las empresas que por tráfico de influencias han adquirido cartera vencida.
En ello hay más de un delito. Uno, que los bancos están violentando la reforma que el Senado de la República le hizo al artículo 62 bis de la Ley del IPAB, en la Legislatura pasada, en la cual se señala que la cartera vencida debe ser negociada a través de los mismos deudores y no por empresas privadas creadas al efecto.
Ahora mismo, por tal, El Barzón les está exigiendo a los legisladores federales que hagan valer dicha reforma, y además, que intervengan para que la cartera que ya fue negociada con las empresa propiedad de gente influyente, le sea regresada al IPAB para que éste a su vez la negocie a través de una ventanilla única, con la plena aprobación de los deudores.
Los Bribiesca Sahagún siguen manejándose en la total impunidad.
Porque, contra lo que se pensaba, el señor Calderón no ha tenido los arrestos suficientes para entrarle al tema que ofende a toda la sociedad.
Me dice al respecto mi amigo Mario González: "Mi papá me dijo que para sentarse en la silla presidencial no sólo hacían falta un par de nalgas, sino además un par de güe... que colgaran. Ha habido varios presidentes con las gónadas suficientes para sentarse como Díaz Ordaz... Fox cambió la silla de montar por la presidencial y luego por un cómodo love seat para compartirlo con Marta, y pronto se transformó en un diván de siquiatra. Calderón está obligado a recuperar la institución... y si no se ejerce, se diluye".
No es novedad. Las carteras vencidas de los bancos han crecido en los últimos meses una barbaridad. La crítica escasez de dinero ha provocado que muchos jefes de familia dejen de pagar créditos al consumo, por vehículos e hipotecarios, para poder poner alimentos, cada vez más caros, en la mesa de sus dependientes.
Ante ello, los bancos no sufren ni se acongojan. Y es que aún arrastrando tales pasivos, no dejan de ganar. Gracias a la cómplice permisividad de las autoridades financieras cobran sus servicios en nuestro país como no lo hacen en ninguna otra parte del planeta.
Y como en el pasado reciente, los bancos subcontratan la cobranza de los adeudos de sus acreditados a despachos especializados que, en algunos casos, compran esas carteras en centavos por cada peso que el cuentahabiente debe a la institución bancaria.
Son negocios de riesgo, claro está. Estos bufetes jurídicos no alcanzan a cobrar todo. Pero la parte que recuperan, les deja alguna ganancia.
No sucede así, claro, cuando hay influencias políticas.
El caso de los hermanos Bribiesca Sahagún, hijos de la actual esposa del ex presidente Vicente Fox, es al parecer uno de esos.
Porque aún "huidos" o fugados en el extranjero, que para el caso es lo mismo, tanto Manuel como Jorge Alberto, estarían comprando ahora mismo carteras vencidas de los bancos con el claro objetivo de incrementar sus súbitas y malhabidas riquezas.
De acuerdo a Eliseo Cervantes Ramírez, dirigente en Nayarit de la organización de deudores El Barzón, la de los Bribiesca es una de las empresas que por tráfico de influencias han adquirido cartera vencida.
En ello hay más de un delito. Uno, que los bancos están violentando la reforma que el Senado de la República le hizo al artículo 62 bis de la Ley del IPAB, en la Legislatura pasada, en la cual se señala que la cartera vencida debe ser negociada a través de los mismos deudores y no por empresas privadas creadas al efecto.
Ahora mismo, por tal, El Barzón les está exigiendo a los legisladores federales que hagan valer dicha reforma, y además, que intervengan para que la cartera que ya fue negociada con las empresa propiedad de gente influyente, le sea regresada al IPAB para que éste a su vez la negocie a través de una ventanilla única, con la plena aprobación de los deudores.
Los Bribiesca Sahagún siguen manejándose en la total impunidad.
Porque, contra lo que se pensaba, el señor Calderón no ha tenido los arrestos suficientes para entrarle al tema que ofende a toda la sociedad.
Me dice al respecto mi amigo Mario González: "Mi papá me dijo que para sentarse en la silla presidencial no sólo hacían falta un par de nalgas, sino además un par de güe... que colgaran. Ha habido varios presidentes con las gónadas suficientes para sentarse como Díaz Ordaz... Fox cambió la silla de montar por la presidencial y luego por un cómodo love seat para compartirlo con Marta, y pronto se transformó en un diván de siquiatra. Calderón está obligado a recuperar la institución... y si no se ejerce, se diluye".