LE PRONOSTICAN A FeCAL EL BREVE CERO GENERACION DE EMPLEO
Vladimir Galeana
12/02/2007 12:11:08 a.m.
La Comisión Económica para América Latina (CEPAL) puso el dedo en la llaga al señalar que el gobierno del Presidente Felipe Calderón Hinojosa tendrá dificultades para cumplir con su objetivo de generar empleos. Que la tensión social propiciada por las ejecuciones del narco y el conflicto de Oaxaca generan riesgos para la entrada de capitales. Que las tasas de inversión son las más bajas de América Latina. Que los recursos asignados a la política asistencial son ínfimos. Que será complicado reducir la pobreza si la base es exclusivamente el Programa Oportunidades. Que economías como las de Chile y Brasil han rebasado a México y su crecimiento no ha sido lo suficientemente alto para generar fuentes de trabajo. Que para elevar el crecimiento el país debe aumentar su tasa de inversión del 22 al 28 por ciento del Producto Interno Bruto. Que la atracción de la inversión extranjera no debe ser de tipo maquilador, sino realmente productiva, con bastante valor agregado. Que se deben reorientar los subsidios hacia los sectores más desprotegidos pues en la actualidad benefician a grupos privilegiados.
En fin, todo un catálogo de lo que se debe hacer para salir del bache en que nos encontramos y que Vicente Fox Quesada nos ocultó con su cantaleta de que México es un país maravilloso y lleno de oportunidades. Lo del siete por ciento de crecimiento anual queda para la anécdota histórica, y su incapacidad también. Mientras los organismos financieros internacionales nos siguen diciendo que las cosas pueden mejorar si nos ponemos de acuerdo en lo que tenemos que hacer, las diferencias entre las principales fuerzas políticas dicen lo contrario, lo que sumado a la respuesta del narco por los operativos realizados por el Gobierno Federal, hacen que el panorama se observe bastante difícil.
Mientras más violenta sea la destrucción del crimen organizado, más contundente será la respuesta del Estado Mexicano para combatirlo, advirtió el sábado pasado el Presidente Felipe Calderón Hinojosa, y creo que está en lo correcto porque en esta empresa no puede haber regreso. La lucha no es de calderón, sino de lo que representa como Jefe del Estado, y en consecuencia todos los sectores deben involucrarse. Mientras en las calles siga habiendo droga el negocio de los cárteles seguirá funcionando, y en esto tienen mucho que hacer los propios ciudadanos para denunciar lo que ocurre en cada calle, colonia o población, pero también tendrá que haber una respuesta contundente de todas las esferas policiacas para recuperar esa confianza perdida.
Por lo que corresponde a las medidas propuestas por la CEPAL y que también han abordado otras instituciones especializadas, es necesario hoy más que nunca que los actores políticos que conducen el rumbo del país dejen de lado sus diferencias y se pongan a trabajar en la construcción de acuerdos comenzando por las coincidencias, pues México no puede ni debe postergar las soluciones porque cada día se incrementa el riesgo de un estallido social. Felipe Calderón ha sido reiterativo en sus llamados a la unidad pero no ha encontrado el eco necesario. Durante la celebración del 90 aniversario de la promulgación de la Constitución el líder del Senado de la República, Manlio Fabio Beltrones, fue certero en su diagnóstico de la realidad política del país al señalar que los gobiernos tienen que ser compartidos porque así lo dispuso la ciudadanía el dos de julio, y lo que esperamos los mexicanos es que los políticos tengan la capacidad de ponerse de acuerdo.
Por eso me parece reprobable la actitud de Carlos Navarrete Ruiz, quien por cierto coordina la fracción parlamentaria de su partido en el Senado de la República, y que durante la celebración de los trabajos del pasado Consejo Nacional propuso a su partido y a los que conforman el Frente Amplio Progresista establecer alianzas lo más que sea posible para enfrentar al Gobierno Federal y al PAN, acusando a este partido de estar ensoberbecido, crecido y muy arrogante, por lo que “sería muy importante que sufriera una derrota electoral propiciada por la izquierda”. También los llamó a ampliar su horizonte de alianzas en los comicios locales para evitar que se organicen elecciones de Estado.
Me parece que la visión electorera y cortoplacista del Senador Navarrete es producto del encono por la derrota sufrida el año pasado, y que para superar esa catarsis debe comenzar por liberarse de esos resabios personales y comenzar a visualizar la importancia de su cargo en el esquema republicano de gobierno, pues si los diputados representan a los ciudadanos, los senadores representan a la Federación, y en consecuencia no puede anteponer sus intereses partidistas a los intereses superiores de la Nación. Esa debe ser la diferencia entre los enconos grupales y la responsabilidad de integrar uno de los poderes del Estado.
La principal misión de un legislador es mirar por el bienestar de los ciudadanos, del país y de la institución a la que representa. Vuelvo a repetir, Navarrete forma parte del esquema tripartita del Estado Mexicano, por ello no puede hacer un llamado a combatir y confrontar al Gobierno Federal que también forma parte del Estado al igual que él. Lo mejor, insisto, es la búsqueda de acuerdos en función del interés superior de la Nación. México necesita de todos para recomponer lo que se quedó en el pasado, pero sobre todo, decisión para construir el futuro. No se puede apostar al fracaso de una parte del Estado porque se atenta contra México, ese todo al que todos pertenecemos. Las propuestas están sobre la mesa, los mexicanos esperamos responsabilidad de nuestros gobernantes. O están con México o contra México. Al tiempo.