LA DESCOMPOSICION DEL PAN EN YUCATAN

La realidad del proceso interno del PAN

jueves, 28 de diciembre de 2006
Edmundo Contreras

La realidad de descomposición que ha venido dándose en el Partido Acción Nacional se proyecta contundente en el reportaje que sobre este proceso de deterioro se publica en la edición de ayer de este periódico POR ESTO!, en el que desde el plano nacional se da cuenta de cómo la herencia doctrinaria de los fundadores del partido "está hoy arrumbada por la abulia de los dirigentes y militantes del blanquiazul".

Y agrega el informe firmado por µlvaro Delgado de la agencia Apro que en esta degradación doctrinaria se incluyen los actuales funcionarios gubernamentales de todo nivel, emanados del PAN, "embrutecidos por el poder hasta el hartazgo", cómo se denota actualmente con el "más reciente ejemplo de la contraposición entre lo que es y debe ser" que surge desde Yucatán debido al proceso interno de selección del candidato panista a la gubernatura del Estado.

Ya que como se establece de forma contundente en este objetivo reportaje en torno a este episodio tan lamentable que se ventila en nuestra Entidad: "el proceso electoral interno del PAN para elegir al candidato a la gubernatura de Yucatán, es el ejemplo más reciente de esta descomposición y pérdida de los ideales panistas", que constituye el meollo de esta y otras entregas precedentes sobre el tema, en las que hemos significado esta realidad derivada de su acceso al poder.

De esa cuasi enfermiza búsqueda del poder por el poder mismo que se plasma espléndida en esta especie de retrospectiva informativa sobre la descomposición que prevalece en el PAN, en donde esos ideales y premisas ponderadas por Manuel Gómez Morín y otros fundadores del partido han sido destinadas al olvido "salvo para adornar discursos vacíos" como es innegable viene sucediendo en Yucatán de unos años a la fecha.

Sin que esto signifique que esa descomposición y pérdida de los ideales panistas sea exclusiva de nuestra Entidad, no, pues es claro y así se consigna también en la información al respecto, que esto es parte de un proceso nacional que se magnifica en donde, como en nuestro caso, se tiene a autoridades y funcionarios emanados del PAN, como sucede con Patricio Patrón Laviada y esa horda de neopanistas que con su manoseo aberrante del proceso interno de selección de su candidato puntean en la confirmación de esta realidad degradada.

De hecho, como se apunta también en el reporte sobre la realidad del PAN, existen numerosos antecedentes de prácticas ilegales e inmorales en otros procesos internos, como en Guanajuato, y más recientemente en la elección que ganó Felipe Calderón Hinojosa -"por no aludir al proceso constitucional"-, que por no haber sido sancionados incuban más conductas deleznables.

Lo que deja por los suelos esa proclama de "otro mexicano de estatura", de Efraín González Luna, en el sentido de que "cualesquiera que sean las circunstancias, es deber fundamental del jefe de Estado serlo positivamente y no representar ni servir a un partido o a una camarilla, aún cuando le deba su acceso al poder", que se estrella estrepitosa ante la realidad del proceso interno del PAN en Yucatán.

Al igual que lo ponderado por Adolfo Christlieb Ibarrola, eso de que "el gobierno y el partido en el poder no deben identificarse" que, al igual que las proclamas citadas aquí y otras más de los próceres del PAN, guías de los dirigentes y militantes, y mismas que, incluso, en sustancia se establecen en los documentos básicos del partido, por ese arrumbamiento que se deriva de su acceso al poder, le dan forma a esta realidad panista de hoy.

Esta de deterioro y de descomposición que acá en Yucatán ha marcado en definitiva al PAN, a partir de este proceso interno de selección de su candidato a la gubernatura que le da forma a un caso que por su gravedad y delicadeza ha trascendido el plano estatal del partido, inclusive el nacional para convertirse en un asunto de interés publico, dado que se trata precisamente de quienes detentan actualmente el poder.

Tal como se señala en ese reporte publicado ayer por el POR ESTO!, en el que de manera textual se advierte que por sus características "el asunto rebasa los límites de Yucatán y a los militantes y simpatizantes del PAN, porque nos remite a prácticas que ya no son patrimonio de un partido político, sino parte de una enfermedad nacional que está degradando a la nación, atormentada de por sí por latrocinios de toda escala".

Y agrega que, por todo lo anterior, "ignorar el tamaño del problema en Yucatán no es sólo un asunto de disimulo y cobardía, ni siquiera de alegar que se trata de algo que sólo corresponde a los panistas, porque hay que tener claro, por ejemplo, lo que establece el artículo constitucional: Los partidos políticos son entidades de interés público".

Por eso es que este asunto de Yucatán se presenta como el más reciente ejemplo de la descomposición que ha sentenciado al PAN, "antes, durante y después del proceso interno para elegir al candidato a la gubernatura en el que Ana Rosa Payán Cervera, una de las contendientes, señala una y otra vez que fue una "elección de Estado" (para favorecer a Xavier Abreu Sierra)".

Señalamientos de Ana Rosa Payán que acredita con abundantes pruebas que deben ser valoradas, se coincide en la información nacional, ya que "son de extrema gravedad" pues le dan forma a la descomposición que se sustenta con estos ejemplos contundentes y se ha extendido implacable en todos los planos, al grado de que todo ha quedado en evidencia exacerbado por este detonante que surge en Yucatán ante LA REALIDAD DEL PROCESO INTERNO DEL PAN.