NI LOS PANUCHOS SE AGUANTAN SOLOS, QUE PUEDE ESPERAR EL PUEBLO DE ELLOS?
Álvaro Delgado
* Enconos en Yucatán, Aguascalientes, Campeche, Querétaro, Guanajuato, BC y Michoacán
México, D.F., 8 de enero (apro).- El Partido Acción Nacional (PAN) es ya la primera fuerza política de México, pero también la arena de encarnizadas confrontaciones por el poder entre sus propias facciones internas.
Las públicas reyertas que han sostenido el presidente del PAN, Manuel Espino, y Felipe Calderón, declarado ganador de los comicios presidenciales por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), son apenas una expresión de las pugnas internas que se reproducen en todos los estados, particularmente en las que ese partido es gobierno.
Aunque Espino concluye su periodo en el 2009, la disputa por la presidencia del PAN se da en estos momentos cuando se celebra, con bajo perfil, la selección de quienes aspiran a ser miembros del Consejo Nacional, que se renovará en marzo, en la Asamblea Nacional.
Pero mal comienza el año el PAN, precisamente por las pugnas intestinas.
“La presión, la coacción, la compra del voto y la utilización de recursos públicos en el proceso electoral interno o externo, tan malo lo uno como lo otro, son cuestiones que no habíamos vivido antes”, asume Ana Rosa Payán, precandidata a gobernadora de Yucatán, quien afirma ser víctima de la defraudación electoral encabezada por el gobernador de su propio partido, Patricio Patrón Laviada.
En lo que es una de las más recias denuncias de la “desviaciones” del PAN, que reproduce prácticas fraudulentas priistas de las que tanto se quejó durante toda su historia de 67 años, Payán juzga:
“Hoy más que nunca debemos tener absoluta congruencia y firmeza en lo que predicamos en el pasado con lo que vivimos en el presente.”
Payán fue notificada hoy por el comité estatal de su partido de que no prosperaron las impugnaciones que formuló contra la victoria de Xavier Abreu Sierra, algo que ya había anticipado que ocurriría, debido a que fue una “elección de Estado”, por lo que ahora llevará el litigio ante el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PAN.
Amiga de Espino, a cuyo grupo político pertenece, y adversaria de Calderón, de quien Abreu Sierra fue coordinador estatal de la campaña presidencial, Payán espera que el CEN anule las elecciones o la nombre a ella candidata a suceder a Patrón Laviada, quien controla, asegura, el PAN en el estado .
“El hecho de que seamos amigos no quiere decir, de ninguna manera, que esté comprometido conmigo contra viento y marea. Obviamente hay un comité nacional, no es Manuel Espino absoluto, ni por amistad va exclusivamente a tomar una decisión. Lo único que le pedí a Manuel es imparcialidad, objetividad y, por supuesto, ética. Es todo, no pido más.”
Pero el caso de Yucatán, que celebró elecciones internas el domingo 17 de diciembre, es apenas uno de los varios conflictos internos de ese partido, a los que se suman Aguascalientes, Campeche, Querétaro, Guanajuato, Baja California y Michoacán.
En estos dos últimos habrá, como en Yucatán, elecciones para gobernador este año, y los grupos internos han comenzado una confrontación para disputarse las candidaturas que incluyen alcaldes y diputados locales.
En Aguascalientes, un grupo de panistas encabezados por el presidente estatal, Juan Antonio Martín del Campo, procesan la expulsión ni más ni menos que del gobernador, Luis Armando Reynoso Femat, debido a que ha vulnerado los principios de ese partido.
Aunque él ya lo negó públicamente, Felipe González, exgobernador y actual senador, es identificado como el autor de la reyerta contra Reynoso Femat, quien pretende endeudar al estado con 2 mil millones de pesos, apoyado por diputados panistas afines y de la oposición presuntamente corrompidos por él.
La sombra de Mouriño
En Aguascalientes prevalece el escándalo por el enfrentamiento interno, y hasta ahora el CEN del PAN no ha emitido ningún pronunciamiento al respecto, como tampoco lo ha hecho en el caso de Campeche, en que el jefe de la Oficina de la Presidencia, Juan Camilo Mouriño, ha buscado deponer de la presidente estatal del PAN al exsenador Jorge Nordhausen.
La pugna tiene que ver, también, con la disputa por la gubernatura, en el 2009, que Nordhausen pretende, con el disgusto de la familia Mouriño, que en Campeche tiene la sede de su emporio económico, que se extiende a toda la península y aun a España, donde nació Juan Camilo.
Según Nordhausen, poco después del proceso electoral del 2 de julio, sin haberse calificado los comicios y, menos aún, declarado a Calderón presidente electo, Juan Camilo Mouriño comenzó a ejercer el poder en Campeche, su tierra adoptiva.
De manera soterrada, el joven político --nacido en Madrid, España, en 1971 y que, al cumplir la mayoría de edad, en 1989, renunció a esa nacionalidad-- comenzó a mover los hilos del poder en la entidad, y una de sus primeras jugadas fue “moverle el piso” a Nordhausen.
Según el también diputado federal con licencia, Mouriño utilizó de “correo” a su hermano mayor, Carlos, para hacerle llegar un mensaje: que renunciara a la presidencia estatal del PAN, a pesar que su gestión culmina en mayo de 2007.
Y comentó respecto de la singular posición de Mouriño en el gabinete presidencial:
“Tendrá acceso no sólo a la política interior, sino también a la política exterior, y para nosotros es importante y motivo de mucha satisfacción que alguien de Campeche esté ocupando una posición de tanta relevancia.
“Tenemos muchas expectativas en Campeche de Juan Camilo, con mucha mayor razón porque tendrá acceso a todos los secretarios de Estado y al propio presidente de la Republica. Tengo expectativas de que trabaje por el bien de México, aunque es español”, observó.
Las pugnas internas se presentan, también, en Baja California, donde el PAN conquistó su primera gubernatura, en 1989, y gobierna desde entonces:
Buscan la candidatura panista Guadalupe Osuna Millán, Francisco Vega y Héctor Osuna Jaime.
La disputa interna, que se anticipa feroz, se enmarca en el temor de que Jorge Hank sea el candidato priista que, pese a su mala reputación, arrebató al PAN la alcaldía de Tijuana en las elecciones del 2004, debido entre otros factores a la corrupción y la criminalidad extendida en todo el estado.
En Michoacán, en que también habrá elecciones este año, se perfila como candidato Salvador López Orduña, alcalde de Morelia y allegado a Calderón, quien sin embargo prevé competencia con Luis Mejía, delegado de la Secretaría de Desarrollo Social durante el gobierno de Vicente Fox.
En Querétaro, gobernado por el PAN, se observa una aparente pugna entre dos grupos de panistas, que se reflejó en la elección para presidente estatal, celebrada apenas el viernes 22 del mes pasado en que, después de tres rondas de votación de los 64 consejeros estatales, no se logró superar el empate a 32 votos entre Luis Bernardo Nava y Ricardo Anaya Cortés.
Nava es miembro de una de las familias que han controlado el PAN desde hace al menos dos décadas, y Anaya fue secretario particular del gobernador Francisco Garrido Patrón, supuestamente en pugna por la candidatura a gobernador, en el 2009.
En Guanajuato, donde reside ahora Fox, también se registra una lucha soterrada entre los seguidores de Calderón, y el grupo que controla el PAN y el gobierno estatal, encabezado por Juan Manuel Oliva, quien ganó las elecciones el 2 de julio.