No cerremos los ojos: ¡¡México está en venta!!
Por Esto
A casi diez años de que dio inicio el siglo 21, vale la pena, ante la difícil situación que vivimos en el país, detenerse a reflexionar un poco sobre ello. Empezamos el nuevo milenio con un esperadísimo cambio de gobierno, algo lógico y sano, después de más de 70 años de control total por parte de un solo partido, la oposición logró llegar indiscutiblemente al poder por medio del ya famoso voto de castigo. Ante la “algarabía” general un “vaquero”, bigotón, dicharachero y “simpático” empresario cocacolero accedió al anhelado Poder Ejecutivo…
Mientras una izquierda mexicana muy dividida se retorcía del coraje y un partido tricolor llegaba al punto del infarto, la derecha moderada y la ultraderecha brincaban de alegría, ¡¡al fin les llegaba su momento!!.. Los empresarios, banqueros, industriales, mochos”, conservadores y fascistas estaban dispuestos a todo con tal de lograr sus objetivos… Decenas de promesas, esperanzas, revanchas y ajuste de cuentas se vivieron durante los primeros años de aquel trágico sexenio y enseguida hicieron su aparición el desaliento, la decepción, la incertidumbre y la inseguridad… El pueblo, el siempre sufrido pueblo, se empezaba a dar cuenta de que nos esperaban seis años caóticos y sin rumbo…
Como nunca antes, el país quedó en manos de la iniciativa privada, comprometida hasta la médula con los EEUU y al mismo tiempo las mafias reclamaron sus territorios, al igual que el siempre oportunista clero, y, por si fuera poco, los viejos y nuevos políticos corruptos utilizaban todos sus recursos para no perder el control...
Ya todos coludidos se inició un combate sin tregua contra líderes populares, sindicatos independientes, periodistas e intelectuales, logrando debilitar diversos movimientos populares de protesta y de los trabajadores, dejando la “mesa servida” para sus sucesores… Igual a como ya venían haciendo los tres últimos presidentes priístas al servicio descarado del neo-liberalismo… pero algunos todavía les estorbaban para llevar a feliz término sus maquiavélicos planes. A pesar del divisionismo interno de la inestable izquierda mexicana, ésta buscaba las maneras de desempeñarse como una verdadera oposición, con todo y los coqueteos de su eterno “líder moral” con las estructuras del poder…
Así se empezó a maquinar otro fraude más, con el descarado e indignante apoyo de los desprestigiados medios de comunicación y, como era de suponerse, con semejantes poderes unidos lograron que la derecha se mantuviera en el poder… y de esta manera alguien que es considerado espurio e ilegítimo por millones de mexicanos es el que actualmente ostenta el “bastón de mando”, aunque más bien es un “bastón” prestado, pues el dueño y el que maneja los “hilos” es el demonio que dirige al vecino país del Norte. Así brincamos de un sexenio tragicómico, de saqueo descarado y cinismo inaudito, al que estamos padeciendo actualmente; y todavía quieren hacernos creer que vivimos en un país más austero (pero de ideas y proyectos) , más serio, libre (y sí lo es, pues los planes de vender al país son cosa muy seria, y ni qué decir de la libertad de que gozan las mafias), y muy trabajador (por el gran trabajo que nos cuesta aceptar mantener a toda esta bola de zánganos y parásitos), plural e incluyente (como ninguno pues ha sabido incluír, sin restricciones a todos sus recomendados, familiares, bandidos y voraces empresarios) y sensible y preocupado por el pueblo (muy eficaz en eso de regalar migajas y dar muy buenas mordidas)…
Como podrán darse cuenta vivimos dentro de dos realidades en nuestro querido México…
Cada vez es más notorio el creciente desencanto e inconformidad de la gente pensante, y si lo digo así no es porque considere que los que no comparten esta visión no lo sean, pero sí me resulta incomprensible que aún existan compatriotas que no se den cuenta de la perversa manipulación informativa y denigrantes campañas en contra de los que no aceptamos ni creemos en su “proyecto de nación”, proyecto que podemos resumir como una descarada venta de los principales recursos del país al mejor postor. Cómo se atreven a hablar y juzgar diputados, senadores y líderes que han sido acusados de corruptos, pederastas y narcos… Cómo podemos creerle a una autoridad que intentó construir un muro para dividir un municipio y que se autonombra “supernico”, o a individuos “brillantes” como Jaime Lozano o el “infumable” españolito de Gobernación; y ni qué decir de la amplia gama de merolicos de la televisión… Por favor señoras y señores debemos abrir los ojos, ya no podemos permanecer apáticos, insensibles y ajenos a una dura y negra realidad que se nos viene encima y de cuyas consecuencias NADIE se librará, sobretodo nuestros hijos y las futuras generaciones… Ojalá me equivoque.
A casi diez años de que dio inicio el siglo 21, vale la pena, ante la difícil situación que vivimos en el país, detenerse a reflexionar un poco sobre ello. Empezamos el nuevo milenio con un esperadísimo cambio de gobierno, algo lógico y sano, después de más de 70 años de control total por parte de un solo partido, la oposición logró llegar indiscutiblemente al poder por medio del ya famoso voto de castigo. Ante la “algarabía” general un “vaquero”, bigotón, dicharachero y “simpático” empresario cocacolero accedió al anhelado Poder Ejecutivo…
Mientras una izquierda mexicana muy dividida se retorcía del coraje y un partido tricolor llegaba al punto del infarto, la derecha moderada y la ultraderecha brincaban de alegría, ¡¡al fin les llegaba su momento!!.. Los empresarios, banqueros, industriales, mochos”, conservadores y fascistas estaban dispuestos a todo con tal de lograr sus objetivos… Decenas de promesas, esperanzas, revanchas y ajuste de cuentas se vivieron durante los primeros años de aquel trágico sexenio y enseguida hicieron su aparición el desaliento, la decepción, la incertidumbre y la inseguridad… El pueblo, el siempre sufrido pueblo, se empezaba a dar cuenta de que nos esperaban seis años caóticos y sin rumbo…
Como nunca antes, el país quedó en manos de la iniciativa privada, comprometida hasta la médula con los EEUU y al mismo tiempo las mafias reclamaron sus territorios, al igual que el siempre oportunista clero, y, por si fuera poco, los viejos y nuevos políticos corruptos utilizaban todos sus recursos para no perder el control...
Ya todos coludidos se inició un combate sin tregua contra líderes populares, sindicatos independientes, periodistas e intelectuales, logrando debilitar diversos movimientos populares de protesta y de los trabajadores, dejando la “mesa servida” para sus sucesores… Igual a como ya venían haciendo los tres últimos presidentes priístas al servicio descarado del neo-liberalismo… pero algunos todavía les estorbaban para llevar a feliz término sus maquiavélicos planes. A pesar del divisionismo interno de la inestable izquierda mexicana, ésta buscaba las maneras de desempeñarse como una verdadera oposición, con todo y los coqueteos de su eterno “líder moral” con las estructuras del poder…
Así se empezó a maquinar otro fraude más, con el descarado e indignante apoyo de los desprestigiados medios de comunicación y, como era de suponerse, con semejantes poderes unidos lograron que la derecha se mantuviera en el poder… y de esta manera alguien que es considerado espurio e ilegítimo por millones de mexicanos es el que actualmente ostenta el “bastón de mando”, aunque más bien es un “bastón” prestado, pues el dueño y el que maneja los “hilos” es el demonio que dirige al vecino país del Norte. Así brincamos de un sexenio tragicómico, de saqueo descarado y cinismo inaudito, al que estamos padeciendo actualmente; y todavía quieren hacernos creer que vivimos en un país más austero (pero de ideas y proyectos) , más serio, libre (y sí lo es, pues los planes de vender al país son cosa muy seria, y ni qué decir de la libertad de que gozan las mafias), y muy trabajador (por el gran trabajo que nos cuesta aceptar mantener a toda esta bola de zánganos y parásitos), plural e incluyente (como ninguno pues ha sabido incluír, sin restricciones a todos sus recomendados, familiares, bandidos y voraces empresarios) y sensible y preocupado por el pueblo (muy eficaz en eso de regalar migajas y dar muy buenas mordidas)…
Como podrán darse cuenta vivimos dentro de dos realidades en nuestro querido México…
Cada vez es más notorio el creciente desencanto e inconformidad de la gente pensante, y si lo digo así no es porque considere que los que no comparten esta visión no lo sean, pero sí me resulta incomprensible que aún existan compatriotas que no se den cuenta de la perversa manipulación informativa y denigrantes campañas en contra de los que no aceptamos ni creemos en su “proyecto de nación”, proyecto que podemos resumir como una descarada venta de los principales recursos del país al mejor postor. Cómo se atreven a hablar y juzgar diputados, senadores y líderes que han sido acusados de corruptos, pederastas y narcos… Cómo podemos creerle a una autoridad que intentó construir un muro para dividir un municipio y que se autonombra “supernico”, o a individuos “brillantes” como Jaime Lozano o el “infumable” españolito de Gobernación; y ni qué decir de la amplia gama de merolicos de la televisión… Por favor señoras y señores debemos abrir los ojos, ya no podemos permanecer apáticos, insensibles y ajenos a una dura y negra realidad que se nos viene encima y de cuyas consecuencias NADIE se librará, sobretodo nuestros hijos y las futuras generaciones… Ojalá me equivoque.