LAS FECHAS CONMEMORATIVAS QUE PODRIAN CANCELARSE

Se cancela el desfile del 20 de noviembre. Chale. Bueno, quizá los únicos que lo extrañen sean los apreciadores del complicado arte de mover pompones del que hacían gala las porristas participantes. “Modernization for the nation” parece decir don Rubén Aguilar cuando afirma que hay que darle un “nuevo carácter” (¿antes tuvo “carácter”?) al obsoleto modelo del festejo de la Revolución Mexicana.
¡Pues claro! Si ya se ha demostrado que actos como los informes presidenciales o dar el Grito de Independencia en el Zócalo se pueden renovar (pero que conste que la figura del Peje no tiene nada que ver con esas decisiones, ¿eh?)
Muy bien, ¿por qué no cancelar de una vez por todas un desfile con hartos deportistas y ningún revolucionario? Es más, para volvernos más modernos, he aquí una lista de fechas emblemáticas que ya podríamos mandar directito al basurero. Todo sea en nombre del progreso.


Día de las madres
Si hasta los organismos unicelulares pueden crear otra vida, ¿por qué vamos a celebrar a un montón de cabecitas blancas (y negras, y pelirrojas), que lo único que hicieron fue ceder a los instintos… de conservación?

Día de Muertos
Que los muertos se vayan al hoyo y los vivos al bollo. Eso de andar recordando antepasados evita que podamos ver hacia el futuro y sus inacabables oportunidades de modernidad. Además, consumir calaveritas de dulce podría disparar el número de diabéticos en México, lo que generaría altos costos en los gastos de salud. También proponemos prohibir la producción de pan de muerto: las peleas por quedarse con la bolita del centro podrían causar desintegración familiar.

Batalla de Puebla
Las armas mexicanas se cubrieron de gloria… y ahora están oxidándose en algún sitio olvidado por Dios y los hombres. Sacudámonos este festejo obsoleto y anacrónico y volvamos a instaurarlo el día en que podamos ganarle un partido a Francia en algún Mundial lejano.

Día de la Bandera
Bueno, ok, supongamos que no desaparezca ese día. Pero lo que sí se erradicará es que en las escuelas los niños reciten esa hórrida oda que dice: “Banderita, banderita, banderita tricolor” o la de “bandera de treees colooores, yo te doy mi corazoooón” ¡Argggh!

Niños Héroes
Hay gente que cree tanto en la existencia de los Niños Héroes como en la de Caperucita Roja. Si ella no tiene un día, ¿Por qué ellos sí?

Día de la Constitución
La Constitución es como los semáforos a medianoche. Nadie la respeta o si lo hace, es nomás para amparar su permanencia en el poder (¿o no, Ulises?). Sugerimos que en su lugar instauremos el día del Teleguía o el Tvnotas. Total: muchos mexicanos le tienen más fe a estas publicaciones que a la justicia y la legalidad.

Día del trabajo
¡Si nadie trabaja ese día! Bueno, a menos que en su sindicato lo amenacen para asistir a las marchas hacia el Zócalo. Mejor establezcamos que todos los primeros de mayo sean considerados un domingo más y vayámonos al Blockbuster a rentar películas con descuento para pasar la tarde.