ENTREVISTA DEL UNIVERSAL AL LIC. MANUEL CAMACHO SOLIS COORDINADOR DE REDES CIUDADANAS
"Es necesario dar salida a la crisis postelectoral"Asegura que urge una cabeza política; pues ahora hay "puros operadores", como Vázquez Mota, "de cara amable, pero en el fondo una posición dura". Advierte que gobernar sin legitimidad -como sería el caso de Calderón si no se hace el recuento de votos- tiene costos; "ni Carlos Salinas aguantó con toda la fuerza del régimen autoritario"
Martha Anaya
El Universal
Ciudad de MéxicoMiércoles 26 de julio de 2006
M anuel Camacho Solís afirma que se requiere una cabeza política tanto del lado del gobierno como del PAN, para medir y analizar la situación que se está viviendo, y darle una salida a la crisis postelectoral., Ahora hay "puros operadores políticos", como Josefina Vázquez Mota, "de cara amable, pero en el fondo una posición dura", y así no se resuelve nada.
El ex comisionado para la paz en Chiapas niega estar jugando él mismo en el ala dura del equipo de López Obrador -"nunca me voy a volver de línea dura, pero soy un hombre realista"-; pero en las condiciones actuales, asevera, "de nada sirve un ofrecimiento suave cuando las condiciones objetivas no están para eso".
En entrevista con El UNIVERSAL, asienta que gobernar sin legitimidad -como sería el caso de Felipe Calderón si no se hace el recuento de votos- tiene costos, las "cargas duran mucho tiempo". Además, recuerda lo que ocurrió en el 94 luego del levantamiento zapatista: "Ni Carlos Salinas aguantó con toda la fuerza del régimen autoritario. Al final tuvo que abrir."
De Luis Carlos Ugalde, presidente consejero del IFE, declara que quiere "encubrir sus errores y debilidades" poniéndose atrás de todo el servicio civil del IFE, y sobre todo de los ciudadanos. Lo que está haciendo "es un acto muy cobarde", sostiene Camacho Solís, uno de los coordinadores del equipo de Andrés Manuel López Obrador.
En este proceso, afirma, a Ugalde "le faltó grandeza personal y terminó acorralado por las circunstancias y mostrando compromisos que no debió haber llevado al momento de las decisiones principales". Su papel ha sido "antiinstitucional y faccioso", y ahora "está desbordando el vaso", intentando movilizar a la opinión pública en contra nuestra; "¡es el colmo!".
El ánimo de Camacho, al igual que el de los miembros de la coalición Por el Bien de Todos, apuntaba hacia el Instituto Federal Electoral. Pero en el caso del ex regente, particulariza en el consejero presidente cuando le preguntamos su opinión sobre el papel que está jugando el IFE en estos momentos:
"Un papel antiinstitucional, faccioso. Están actuando como aliados del PAN, de Felipe Calderón y como agentes de relaciones públicas de ellos. Y no están desempeñando el papel que la Constitución le da al IFE. No son autoridades imparciales, y por lo tanto me parece que se han desgastado. No me parece que el problema sea de toda la estructura del IFE, ni mucho menos de los cientos de ciudadanos que participaron en la elección. Todos ellos son respetables. Por eso, es un acto muy cobarde que él (Ugalde) quiera encubrir sus errores y sus debilidades poniéndose atrás de todo el servicio civil del IFE, ¡y sobre todo de los ciudadanos!
"Lo que Ugalde debería hacer por dignidad es renunciar. Yo creo que sería lo más sensato."
-¿No profundizaría esto la crisis postelectoral?
-¡No, al contrario! Me parece que este tipo de conductas pueden facilitar la solución de la crisis...
-¿Por qué querría Ugalde desempeñar ese papel?
-Porque le faltó grandeza y estaban muy cerca sus compromisos políticos con quienes lo habían apoyado. Insisto, no es el IFE. Estamos hablando del presidente del Consejo.
"Yo conozco a Luis Carlos, hubiera esperado otra cosa de él, pero, finalmente, le faltó carácter, le faltó grandeza personal y terminó en parte acorralado por las circunstancias, en parte mostrando compromisos que no debió haber llevado al momento de las decisiones principales".
-¿Por qué tanto enojo?
-Manifiesto todo esto ¡porque ya es el colmo! Ahora quiere movilizar a la opinión pública en contra nuestra. Esa es la razón por la que ya desbordó el vaso. Él lo está desbordando. Después de sus conductas previas ahora la quiere hacer ya no sólo de partido político, sino de agente movilizador de una parte de la opinión pública y de la sociedad para contrarrestar y combatir a la otra. Me parece que es ya el colmo.
-¿Y esto a dónde los va a llevar?
-Nos va a llevar a debilitar todavía más a estos funcionarios. Porque ellos no pueden ganar en esto.
-¿A crispar más a la gente...?
-Su conducta no es la apropiada.
Aún no llegaba la respuesta a la carta enviada por López Obrador a Calderón cuando conversamos. Pero ya entonces preveía: "Necesitamos que se tomen en cuenta el conjunto de factores que están incidiendo sobre el ambiente político que se vive en el país"
-¿No lo hacen?
-Yo creo que hace falta una cabeza política en el gobierno y en el PAN. Lo que tenemos ahorita son puros operadores políticos. Ahí tienes a Josefina, que si "ya hay mucho ruido", un lenguaje agresivo, poco dialogante. Una cara amable, pero en el fondo una posición dura. Pero ya sabemos que cuando hay un conflicto, esas posiciones empiezan a sobresalir, porque lo que hacen es defender, en este caso, la posición de Felipe Calderón, y el lenguaje va a ser cada vez más duro. Eso no resuelve nada.
"Lo que se necesita es alguien que sea capaz de pensar realmente qué es lo que está pasando, cuáles son los posibles escenarios que se van a tener a partir del día 30, de la tercera asamblea informativa, y a partir de ello, pensar en una salida viable, porque el dilema no es sólo para nosotros. Los dilemas estratégicos no son sólo para AMLO, también lo son para el Presidente de la República y también lo son para Felipe Calderón y su equipo. Entonces, en la medida que haya alguien que evalúe con racionalidad política la situación general, facilitará sin duda la salida de la crisis.
"Sin una propuesta en especial"
-¿Está pensando en un personaje especial?
-No, no estoy pensando en un mediador. Estoy pensando en que haya claridad en el análisis político, que no se dejen ir por las formas del día, por las declaraciones; que miren lo que está ocurriendo con la sociedad, que miren el calendario político que está por venir, que miren las opciones que hay dependiendo qué decide el tribunal, que también incluso que midan cual es su perspectiva en términos de gobernabilidad, si no se le da a este movimiento una respuesta que lo frene.
"Buscaría conciencia sobre estos hechos y acciones políticas consecuentes a una comprensión de fondo a los riesgos políticos que vive el país. Pero no simples declaraciones. ¡Las declaraciones mentirosas no sirven para nada! Hoy lo que necesitamos son hechos políticos que demuestren que hay alguien que está pensando en el Estado, en la estabilidad política del país a mediano plazo. Si no se colocan en esa óptica, las cosas no van a salir bien.
-¿El Presidente de la República podría fungir como árbitro?
-No, porque él tiene una función clave que desempeñar. Sigue teniendo la autoridad, es el Jefe del Poder Ejecutivo y él tiene en sus manos los instrumentos del poder. Él es una figura clave, independientemente de los errores que haya cometido en todo este proceso político, porque al final él es el que da una orden o no. Y en las crisis, el papel de un Presidente se vuelve central.
"Pero también está la lógica de lo que debe hacer el candidato. No necesariamente va a ser la lógica del Presidente en todo momento. La idea sería que en ambos casos de política hubiera un esfuerzo serio de reflexión, que hubiera una comprensión también hacia quienes están enojados con lo que pasó. Ellos mejor que nadie saben de los abusos que se cometieron en esta elección. Y si ellos empiezan por enojarse y endurecerse frente a quienes se sienten agraviados, pues es lógico que vamos a ir a una situación de endurecimiento general, y ese endurecimiento general va a ponernos a nosotros en una dificultad mayor. Pero al Presidente también lo va a meter en una situación difícil, al igual que a Felipe Calderón."
-¿No ve mucha presión de los grupos de poder para que no se dé el recuento?
-Pero es ahí donde Felipe va a tener que decidir si va a ser un presidente con independencia de ellos o si va a ser su mandadero. Si él no es capaz de tomar decisiones autónomas y ya está supeditado a esos intereses, peor. Es decir, va a ser un presidente ilegítimo y además un presidente controlado por intereses especiales.
-Por qué cree que está en contra de la apertura de paquetes?
-Primero, por un temor legítimo. Eso es lo que he escuchado de él, que dice que si abren los paquetes va a haber problemas con esos paquetes y entonces nosotros vamos a solicitar la nulidad de la elección.
"Pero si Andrés Manuel está diciendo con toda claridad, se está comprometiendo públicamente -y todos nos comprometeríamos públicamente- a que si se abren los paquetes no hay anulación, entonces la única razón legítima para tener miedo a la apertura de paquetes ya se acaba.
"La otra es que no quieren que se abran los paquetes porque consideran que no ganaron la elección. Y estando las cosas como están, a pesar de toda la información que ya se conoce, va a dejar un sabor de boca de que aquí hubo engaño, abuso.
-De cualquier manera se puede gobernar así. Lo hizo (Carlos) Salinas de Gortari.
-En ese momento estábamos en un régimen autoritario, pero ya hemos evolucionado, estamos en un régimen democrático y no se puede poner como ejemplo lo que ocurrió en un régimen autoritario para justificar lo de ahora. Además ese gobierno tuvo un costo muy alto porque ve lo que ocurrió. Muchas cosas no fueron gratis. Las cargas durante mucho tiempo. Y el propio gobierno de Salinas, en 94, después de la sublevación zapatista, reconoció que no fue suficiente lo que se había hecho y por lo tanto fue necesario hacer, ya durante la campaña, una reforma constitucional para iniciar la apertura del IFE. O sea, ni Salinas la aguantó con toda la fuerza de régimen autoritario. Al final tuvo que abrir.
-Y usted, ¿no se ha vuelto del ala dura?
-No, no es que yo me haya vuelto de línea dura, no me gusta, nunca me voy a volver de línea dura, pero soy un hombre realista. Y sé que en estas condiciones de nada sirve hacer un ofrecimiento suave cuando las condiciones objetivas no están para eso.
http://www.eluniversal.com.mx/notas/364792.html
Martha Anaya
El Universal
Ciudad de MéxicoMiércoles 26 de julio de 2006
M anuel Camacho Solís afirma que se requiere una cabeza política tanto del lado del gobierno como del PAN, para medir y analizar la situación que se está viviendo, y darle una salida a la crisis postelectoral., Ahora hay "puros operadores políticos", como Josefina Vázquez Mota, "de cara amable, pero en el fondo una posición dura", y así no se resuelve nada.
El ex comisionado para la paz en Chiapas niega estar jugando él mismo en el ala dura del equipo de López Obrador -"nunca me voy a volver de línea dura, pero soy un hombre realista"-; pero en las condiciones actuales, asevera, "de nada sirve un ofrecimiento suave cuando las condiciones objetivas no están para eso".
En entrevista con El UNIVERSAL, asienta que gobernar sin legitimidad -como sería el caso de Felipe Calderón si no se hace el recuento de votos- tiene costos, las "cargas duran mucho tiempo". Además, recuerda lo que ocurrió en el 94 luego del levantamiento zapatista: "Ni Carlos Salinas aguantó con toda la fuerza del régimen autoritario. Al final tuvo que abrir."
De Luis Carlos Ugalde, presidente consejero del IFE, declara que quiere "encubrir sus errores y debilidades" poniéndose atrás de todo el servicio civil del IFE, y sobre todo de los ciudadanos. Lo que está haciendo "es un acto muy cobarde", sostiene Camacho Solís, uno de los coordinadores del equipo de Andrés Manuel López Obrador.
En este proceso, afirma, a Ugalde "le faltó grandeza personal y terminó acorralado por las circunstancias y mostrando compromisos que no debió haber llevado al momento de las decisiones principales". Su papel ha sido "antiinstitucional y faccioso", y ahora "está desbordando el vaso", intentando movilizar a la opinión pública en contra nuestra; "¡es el colmo!".
El ánimo de Camacho, al igual que el de los miembros de la coalición Por el Bien de Todos, apuntaba hacia el Instituto Federal Electoral. Pero en el caso del ex regente, particulariza en el consejero presidente cuando le preguntamos su opinión sobre el papel que está jugando el IFE en estos momentos:
"Un papel antiinstitucional, faccioso. Están actuando como aliados del PAN, de Felipe Calderón y como agentes de relaciones públicas de ellos. Y no están desempeñando el papel que la Constitución le da al IFE. No son autoridades imparciales, y por lo tanto me parece que se han desgastado. No me parece que el problema sea de toda la estructura del IFE, ni mucho menos de los cientos de ciudadanos que participaron en la elección. Todos ellos son respetables. Por eso, es un acto muy cobarde que él (Ugalde) quiera encubrir sus errores y sus debilidades poniéndose atrás de todo el servicio civil del IFE, ¡y sobre todo de los ciudadanos!
"Lo que Ugalde debería hacer por dignidad es renunciar. Yo creo que sería lo más sensato."
-¿No profundizaría esto la crisis postelectoral?
-¡No, al contrario! Me parece que este tipo de conductas pueden facilitar la solución de la crisis...
-¿Por qué querría Ugalde desempeñar ese papel?
-Porque le faltó grandeza y estaban muy cerca sus compromisos políticos con quienes lo habían apoyado. Insisto, no es el IFE. Estamos hablando del presidente del Consejo.
"Yo conozco a Luis Carlos, hubiera esperado otra cosa de él, pero, finalmente, le faltó carácter, le faltó grandeza personal y terminó en parte acorralado por las circunstancias, en parte mostrando compromisos que no debió haber llevado al momento de las decisiones principales".
-¿Por qué tanto enojo?
-Manifiesto todo esto ¡porque ya es el colmo! Ahora quiere movilizar a la opinión pública en contra nuestra. Esa es la razón por la que ya desbordó el vaso. Él lo está desbordando. Después de sus conductas previas ahora la quiere hacer ya no sólo de partido político, sino de agente movilizador de una parte de la opinión pública y de la sociedad para contrarrestar y combatir a la otra. Me parece que es ya el colmo.
-¿Y esto a dónde los va a llevar?
-Nos va a llevar a debilitar todavía más a estos funcionarios. Porque ellos no pueden ganar en esto.
-¿A crispar más a la gente...?
-Su conducta no es la apropiada.
Aún no llegaba la respuesta a la carta enviada por López Obrador a Calderón cuando conversamos. Pero ya entonces preveía: "Necesitamos que se tomen en cuenta el conjunto de factores que están incidiendo sobre el ambiente político que se vive en el país"
-¿No lo hacen?
-Yo creo que hace falta una cabeza política en el gobierno y en el PAN. Lo que tenemos ahorita son puros operadores políticos. Ahí tienes a Josefina, que si "ya hay mucho ruido", un lenguaje agresivo, poco dialogante. Una cara amable, pero en el fondo una posición dura. Pero ya sabemos que cuando hay un conflicto, esas posiciones empiezan a sobresalir, porque lo que hacen es defender, en este caso, la posición de Felipe Calderón, y el lenguaje va a ser cada vez más duro. Eso no resuelve nada.
"Lo que se necesita es alguien que sea capaz de pensar realmente qué es lo que está pasando, cuáles son los posibles escenarios que se van a tener a partir del día 30, de la tercera asamblea informativa, y a partir de ello, pensar en una salida viable, porque el dilema no es sólo para nosotros. Los dilemas estratégicos no son sólo para AMLO, también lo son para el Presidente de la República y también lo son para Felipe Calderón y su equipo. Entonces, en la medida que haya alguien que evalúe con racionalidad política la situación general, facilitará sin duda la salida de la crisis.
"Sin una propuesta en especial"
-¿Está pensando en un personaje especial?
-No, no estoy pensando en un mediador. Estoy pensando en que haya claridad en el análisis político, que no se dejen ir por las formas del día, por las declaraciones; que miren lo que está ocurriendo con la sociedad, que miren el calendario político que está por venir, que miren las opciones que hay dependiendo qué decide el tribunal, que también incluso que midan cual es su perspectiva en términos de gobernabilidad, si no se le da a este movimiento una respuesta que lo frene.
"Buscaría conciencia sobre estos hechos y acciones políticas consecuentes a una comprensión de fondo a los riesgos políticos que vive el país. Pero no simples declaraciones. ¡Las declaraciones mentirosas no sirven para nada! Hoy lo que necesitamos son hechos políticos que demuestren que hay alguien que está pensando en el Estado, en la estabilidad política del país a mediano plazo. Si no se colocan en esa óptica, las cosas no van a salir bien.
-¿El Presidente de la República podría fungir como árbitro?
-No, porque él tiene una función clave que desempeñar. Sigue teniendo la autoridad, es el Jefe del Poder Ejecutivo y él tiene en sus manos los instrumentos del poder. Él es una figura clave, independientemente de los errores que haya cometido en todo este proceso político, porque al final él es el que da una orden o no. Y en las crisis, el papel de un Presidente se vuelve central.
"Pero también está la lógica de lo que debe hacer el candidato. No necesariamente va a ser la lógica del Presidente en todo momento. La idea sería que en ambos casos de política hubiera un esfuerzo serio de reflexión, que hubiera una comprensión también hacia quienes están enojados con lo que pasó. Ellos mejor que nadie saben de los abusos que se cometieron en esta elección. Y si ellos empiezan por enojarse y endurecerse frente a quienes se sienten agraviados, pues es lógico que vamos a ir a una situación de endurecimiento general, y ese endurecimiento general va a ponernos a nosotros en una dificultad mayor. Pero al Presidente también lo va a meter en una situación difícil, al igual que a Felipe Calderón."
-¿No ve mucha presión de los grupos de poder para que no se dé el recuento?
-Pero es ahí donde Felipe va a tener que decidir si va a ser un presidente con independencia de ellos o si va a ser su mandadero. Si él no es capaz de tomar decisiones autónomas y ya está supeditado a esos intereses, peor. Es decir, va a ser un presidente ilegítimo y además un presidente controlado por intereses especiales.
-Por qué cree que está en contra de la apertura de paquetes?
-Primero, por un temor legítimo. Eso es lo que he escuchado de él, que dice que si abren los paquetes va a haber problemas con esos paquetes y entonces nosotros vamos a solicitar la nulidad de la elección.
"Pero si Andrés Manuel está diciendo con toda claridad, se está comprometiendo públicamente -y todos nos comprometeríamos públicamente- a que si se abren los paquetes no hay anulación, entonces la única razón legítima para tener miedo a la apertura de paquetes ya se acaba.
"La otra es que no quieren que se abran los paquetes porque consideran que no ganaron la elección. Y estando las cosas como están, a pesar de toda la información que ya se conoce, va a dejar un sabor de boca de que aquí hubo engaño, abuso.
-De cualquier manera se puede gobernar así. Lo hizo (Carlos) Salinas de Gortari.
-En ese momento estábamos en un régimen autoritario, pero ya hemos evolucionado, estamos en un régimen democrático y no se puede poner como ejemplo lo que ocurrió en un régimen autoritario para justificar lo de ahora. Además ese gobierno tuvo un costo muy alto porque ve lo que ocurrió. Muchas cosas no fueron gratis. Las cargas durante mucho tiempo. Y el propio gobierno de Salinas, en 94, después de la sublevación zapatista, reconoció que no fue suficiente lo que se había hecho y por lo tanto fue necesario hacer, ya durante la campaña, una reforma constitucional para iniciar la apertura del IFE. O sea, ni Salinas la aguantó con toda la fuerza de régimen autoritario. Al final tuvo que abrir.
-Y usted, ¿no se ha vuelto del ala dura?
-No, no es que yo me haya vuelto de línea dura, no me gusta, nunca me voy a volver de línea dura, pero soy un hombre realista. Y sé que en estas condiciones de nada sirve hacer un ofrecimiento suave cuando las condiciones objetivas no están para eso.
http://www.eluniversal.com.mx/notas/364792.html